La sesión plenaria del ayuntamiento de Alaró, celebrada en la noche del jueves pasado, vivió algunos momentos de tensión cuando se debatieron cuestiones económicas, entre ellas, y la más polémica, el sueldo que percibirá la alcaldesa, la socialista Aina Munar, en los dos años que estará al frente del consistorio. Cabe precisar que en 2017 será sustituida por Guillem Balboa, el candidato de Més.

Aina Munar (PSOE) tendrá dedicación exclusiva para su cargo y percibirá un salario de 37.526 euros anuales. Dos de sus concejales, Roger Andrews, profesor de hostelería de la UIB y concejal de participación y fiestas, y Laura Perelló (Més), maestra de educación especial, contarán con una dedicación parcial. Su salario ascenderá a 4.796 euros anuales. Estas cantidades fueron defendidas ante la oposición porque están dentro de los límites establecidos por la ley.

Apoyos

Guillem Balboa, portavoz de Més, justificó la dedicación exclusiva de la alcaldesa y su sueldo, explicando que era esencial tener un responsable del ayuntamiento las 24 horas del día y que era una gran responsabilidad para ella.

Añadió también que su sueldo es inferior al máximo establecido por el ministro Montoro para los municipios con las mismas características que el de Alaró.

Junts per Alaró, el único partido de la oposición, consideró razonable el sueldo de la alcaldesa. Pero destacó la gran diferencia entre las cantidades que se reparten entre la alcaldesa Munar y sus concejales, alegando que cada edil es responsable de su área. Por eso votó en contra de la propuesta de sueldos.

Además, los representantes de Junts criticaron la procedencia del dinero para cubrir los gastos de la dedicación exclusiva, porque se usará dinero de la partida de recogida y tratamiento de basuras, cuando, en su opinión, si sobra efectivo de este apartado debería bajarse la tasa o incrementar el servicio que se presta. Se trata de una cuestión legal, pues una tasa sólo puede cobrarse por el servicio que se presta y no puede generar superávit, explicaron.

Sentencias

Otro tema destacado del pleno fue la aprobación del fondo de financiación para la ejecución de sentencias firmes. Este punto fue aprobado por mayoría absoluta, dado que actualmente hay dos sentencias a las que el ayuntamiento posiblemente deberá hacer frente. Una de ellas es el derribo de los pisos ubicados en el solar del antiguo cine Fantasio, en la calle Pere Rosselló i Oliver.

Finalmente, también se aprobó por unanimidad abrir una investigación sobre la titularidad, pública o privada, del camino de ses Costes de Son Palou.