En el ejercicio de emergencia llevado a cabo ayer en el Port d'Alcúdia, un bañista despistado atravesaba nadando el perímetro de seguridad de la playa, situado a 200 metros de la orilla y cuyo objetivo es separar la zona de baño del área de paso de embarcaciones. Así, una lancha no se percata de la presencia del bañista y lo arrolla, causándole heridas de gravedad en una de las piernas. Rápidamente, los socorristas de la playa se disponen a sacar al accidentado del agua mediante una embarcación.

El herido fue trasladado hasta la playa bajo la mirada atónita de los turistas, que ya se agolpaban en las barreras de seguridad para no perderse ni un detalle de lo que aún creían un accidente real. En la arena, los socorristas realizaron labores de primeros auxilios, a la espera de que la unidad móvil del 112 trasladase al herido hasta el hospital.

María Jesús González, coordinadora de playas del ayuntamiento de Alcúdia, destacó que en una situación real las labores de primeros auxilios se realizarían en el interior de la caseta de los socorristas, y no a pleno sol. "Simplemente, al ser un simulacro hemos decidido hacerlo al aire libre para facilitar la comprensión del operativo por parte del público" explicaba.

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González explicó que el objetivo del ejercicio era, en primer lugar, informar y demostrar a los usuarios de la playa la importancia de respetar la zona de seguridad, pues "la situación que hemos recreado podría suceder en cualquier momento" aseguró.