Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un desarrollo de vértigo

Una panorámica antigua de la costa de Calvià.

Los colectivos medioambientales que defienden la adquisición de Rafaubetx por parte del ayuntamiento de Calvià recuerdan los altos niveles de "depredación y destrucción" que ha sufrido el municipio en las últimas décadas. Algunos datos contenidos en la información técnica del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) así lo corrobora.

Por ejemplo, en la zona de Palmanova y Magaluf, que en 1956 ocupaba una superficie de tres hectáreas (el equivalente a unos seis campos de fútbol), su trama urbana se había extendido medio siglo después a lo largo de 290 hectáreas. Dicho de otra manera, se había multiplicado por 100. Santa Ponça presenta también una evolución similar. De acuerdo a estos mismos datos que aparecen en el PGOU, en 1968 era un núcleo que se extendía por 30 hectáreas. Cuatro décadas después, Santa Ponça ocupaba 314 hectáreas.

Junto a Palmanova-Magaluf y Santa Ponça, la tercera zona del municipio que experimentó un crecimiento más vertiginoso fue la formada por Cas Català e Illetes, que pasó de tener nueve hectáreas construidas en la década de los cincuenta a contar con una superficie de 87 hectáreas.

Compartir el artículo

stats