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Campos

El pionero ecobarrio permanece cerrado y el Govern reserva terreno para 320 nuevas viviendas

La reivindicada segunda escuela pública continúa siendo la gran asignatura pendiente

Aspecto que presenta el ecobarrio de Campos.

La segunda escuela pública en Campos sigue siendo la gran asignatura pendiente. La conselleria de Educación del Govern y el Ajuntament prevén desde hace años su construcción en la zona del nuevo ecobarrio, pionero en Mallorca al ser el "primer barrio sostenible". No obstante, aún no se ha colocado ni la primera piedra del centro educativo y el ecobarrio en cuestión permanece cerrado. En esta área, el Govern del segundo Pacte de Progrés llegó a proyectar cientos de Viviendas de Protección Oficial (VPO). Ello generó polémica y la iniciativa se modificó drásticamente, dando prioridad al colegio y viéndose muy reducida la cifra de viviendas a levantar. El Govern Bauzá actual todavía contempla hasta 320.

Estas 320 viviendas de protección pública reciben la calificación NZEB, es decir, Nearly Zero Energy Building, "de consumo de energía casi nulo", detalla el Govern a través del Institut Balear de l´Habitatge, el IBAVI, ente promotor.

En la legislatura 2011-15, el PP comandado por el presidente Bauzá criticó con dureza reiteradas veces que el Pacte de Progrés aprobase comprar los terrenos de la Unidad de Actuación C2 de Campos (junto a la residencia de mayores) por alrededor de 20 millones de euros. En cualquier caso, el Ejecutivo autonómico reconoce que "las obras de adecuación del ecobarrio han supuesto una inversión de 920.000 euros por parte del IBAVI, financiados con fondos del Ministerio de Fomento".

Una de las múltiples promociones de pisos de Campos que ´lucen´ carteles de en venta. En este sentido, autoridades locales advierten del gran stock de pisos que hoy en día sigue habiendo. T. O.

Este singular, y vallado, ecobarrio ocupa unos 30.000 m2. Tiene en cuenta "criterios de óptima gestión de los recursos (agua, energía, emisiones de CO2, reciclaje); la salud de las personas; creación de zonas verdes y paseos; se han sembrado 260 árboles; previsto mecanismos para evitar inundaciones y apostado por alumbrado con gran ahorro energético".

El alcalde Sagreras responsabiliza al IBAVI de la situación del ecobarrio y cree que sería "una locura" impulsar nuevas viviendas.

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