El alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigròs (GISC), se defendió ayer con pruebas documentales y ocho folios de discurso, de la serie de denuncias presentadas durante los últimos meses por la portavoz del PP local, Manuela Messeguer, una de las cuales le obligará a tener que declarar como imputado, por el supuesto pago de un complemento irregular de 8.000 euros anuales al jefe de la Policía Local.

Una vez terminado el pleno municipal, Puigròs pasó a enumerar las distintas demandas conservadoras, criticando que "ninguna de ellas se puede sustentar en informes técnicos" y que solo van dirigidas "a deteriorar la imagen del que subscribe con falsedades", al tiempo que tachó de "ridículo absoluto" el papel que está llevando a cabo Messeguer, para quien el alcalde ha incurrido en hasta seis irregularidades.

Puigròs explicó que en el caso del inspector de la Policía, el trabajo por el que percibió el dinero extra es fácilmente demostrable y que el Ayuntamiento incluso se ha ahorrado dinero "más de 2.900 euros", en comparación a lo que cobraba el anterior titular de la plaza, Antònia Barceló.

Asimismo el alcalde, que tras ofrecer un primer turno de palabra al PP se negó a que Messeguer respondiera a su defensa, anunció que "después de que se resuelvan todos los casos, interpondremos las demandas civiles y penales que creamos oportunas", contra el Partido Popular.