En el pleno celebrado ayer por la mañana en el ayuntamiento de Marratxí, se aprobó una modificación de la ordenanza de Medio Ambiente, que fue aprobada con los votos a favor del equipo de gobierno y la abstención de toda la oposición formada por Més, PSOE e Independientes. La novedad de esta modificación radica en que los ciudadanos sancionados tendrán la oportunidad de elegir entre el pago en efectivo o efectuar servicios a la comunidad por un determinado periodo de tiempo en función del importe de la sanción.

Por otra parte, en el pleno se debatió una moción de Més sobre la necesidad de impulsar un campaña informativa sobre la ordenanza de perros, que fue rechazada por el equipo de gobierno. El PP tachó el texto de "oportunista", ya que el área de Medio Ambiente tiene ya los carteles y los trípticos para iniciar en breve esta campaña. La moción únicamente contó con los votos a favor de la oposición y en contra del equipo de gobierno del PP.

En el apartado de ruegos y preguntas, ningún portavoz de la oposición solicitó información sobre la querella presentada por Aguas Término de Marratxí contra el alcalde y un edil, de la cual informó este diario. Fuentes de la oposición justificaron la ausencia de preguntas en que se trata de temas particulares.