Consolació ha sufrido el abandono de siete años de incomunicación y se nota. El alcalde Llorenç Galmés y el nuevo rector de las parroquias de Santanyí, s'Alqueria Blanca, es Llombards y Calonge, Josep Ramón Ortega, visitaron ayer las obras de adecuación del camino provisional que conduce al Puig de Consolació, trazado que se ha tenido que habilitar después de que en 2007, el acceso principal al santuario quedara cortado por el derrumbe de un tramo de carretera. Hace sólo dos semanas que empezaron las obras y está previsto que acaben a finales de año.

Según Ortega, una vez se haya arreglado el camino, también se reformarán las partes del santuario dañadas por el paso del tiempo: "Principalmente se han visto deterioradas dos salas y la capilla. En cuanto a las habitaciones, la iglesia y otras habitaciones sólo hará falta una mano de pintura y una limpieza a fondo".

Por lo que respecta al proyecto de adecuación del camino, éste contempla la ampliación de algunos tramos, la aplicación de un nuevo material más resistente que equilibre el camino de tierra y la colocación de barandillas.

Las obras son fruto de un convenio firmado hace unos meses entre el ayuntamiento de Santanyí y el Bisbat de Mallorca, donde se acuerda que el Consistorio se hará cargo del 60% de los 80.000 euros presupuestados y el Bisbat del 40% restante.

El alcalde Galmés ha señalado que "aunque se adecue, se trata de un camino provisional. El Ayuntamiento de Santanyí continuará con los procedimientos judiciales pertinentes para que los responsables del hundimiento del camino principal lo arreglen lo antes posible". El nuevo rector ya ha puesto en marcha una serie de actuaciones urgentes para conseguir recuperar la actividad religiosa en el santuario santanyiner.