El Govern incluirá, en los presupuestos de 2015, una partida de 150.000 euros para terminar de pagar su parte de la construcción del nuevo auditorio de Manacor. El anuncio ha sido acogido con satisfacción por el alcalde Antoni Pastor, quien desde más de dos años reclamaba a José Ramón Bauzá el abono de la deuda contraída a principios de 2012.

Concretamente fue el 11 de abril de ese año cuando el president del Govern, el tenista Rafel Nadal y el propio Pastor se reunieron para firmar un protocolo de colaboración por el cual, tanto la administración autonómica como el deportista, se comprometían a pagar al 50% los 300.000 euros necesarios para poder abrir el centro escénico.

En marzo de 2013 Nadal ingresó su parte, lo que le da derecho a la utilización del auditorio, con 800 butacas de capacidad, o cualquiera de las salas anexas, para la organización de eventos programados por su fundación, o encuentros específicos de sus patrocinadores. Lo que por el momento todavía no ha sucedido.

El problema con el Govern tiene su origen en el acuerdo verbal contraído, antes de las elecciones de 2011, por la entonces consellera de Turismo, Joana Barceló (PSOE) y el alcalde de Manacor (en 2011 aún en las filas del PP), para que el Govern del Pacte aportara 300.000 de los 600.000 euros que faltaban en equipamiento para poder terminar la obra y así abrir al público. Una palabra que se esfumó cuando el proceso se dilató demasiado y el PP consiguió la mayoría absoluta ese mismo 2011. La mala sintonía posterior entre Pastor y Bauzá han hecho que se hayan tenido que esperar casi cuatro años más.

Cabe recordar que el bautizado como Auditori de Manacor, que finalmente costó 5,9 millones de euros, empezó a construirse el 22 de septiembre de 2008, bajo el diseño y la supervisión del arquitecto municipal Joan Pasqual y a través de la empresa madrileña Ortiz.