El ayuntamiento de Sóller elaborará una ordenanza para abundar en la preservación del Barranc de Biniaraix, y prohibirá el paso de vehículos a motor y bicicletas a lo largo de su recorrido por el daño que pudieran ocasionan a la milenaria ruta senderista que une el valle con l'Ofre.
El concejal de Medio Ambiente, Joan Ruiz, se hace eco de las quejas que le han formulado varios propietarios de fincas de la zona del Barranc, que denunciaron el paso indiscriminado de bicicletas de montaña por el camino, lo que a juicio de vecinos y del propio consistorio, "supone un peligro para los senderistas".
Pero lo que más ha encendido todas las alarmas es que recientemente un grupo de personas subió el camino conduciendo quads (vehículos todo terreno de cuatro ruedas de pequeño tamaño) y motos de trial, lo que ha indignado a propietarios de fincas y al concejal solleric.
"No tienen cabida"
El concejal reconoció que actualmente no existe ningún tipo de normativa que limite o prohíba la circulación de bicicletas, motos y quads por las escalinatas del Barranc, lo que le ha conducido a estudiar seriamente la limitación. El concejal opina que las bicicletas y cualquier tipo de vehículo a motor, deben tener el acceso prohibido "porque se trata de una ruta senderista en la que no tienen cabida".
La única duda que le genera la normativa es el paso de las orugas mecánicas que utilizan muchos propietarios para subir y bajar materiales de sus fincas. No descarta que para ellos haya una excepción a la norma.
El camino del Barranc de Biniaraix cuenta ya con una protección paisajística y ambiental, dadas sus características y su ubicación. Pero en cambio, según explica Joan Ruiz a este periódico, no existe ninguna norma que regule el tráfico que se le pueda dar al camino.
