­Este fin de semana se lleva a cabo la 25 edición de la Pujada a Lluc en Bísties que cada año se realiza desde Sóller. En esta conmemorativa edición cerca de un centenar de personas emprendieron ayer el camino en romería hasta Lluc, desde donde regresarán hoy de vuelta a casa. En la edición de este año tomaron la salida un total de 38 equinos (entre caballos, yeguas, burros y asnos) a los que se les sumaron ocho carros que partieron cargados hasta el santuario de Lluc.

La salida se dio a primera hora de la mañana. Los carros tomaron su lenta ruta por la carretera Ma-10, mientra que el amplio grupo de equinos y sus jinetes partieron por caminos de montaña. Así, atravesaron las fincas de Sa Coma, s´Arrom i l´Ofre antes de hacer un alto en el camino en la font del Noguer. En este punto se encontraron los jinetes con los que habían subido en carro. Fue el momento para el descanso y para reponer fuerzas. En la font des Noguer se reunieron los participantes para hacer una copiosa merienda.

Cuando el reloj ya marcaba el mediodía. Los animales descansaron a la sombra y tomaron agua del manantial que fluye en este paraje.

Tal y como explicaron algunos participantes, la subida hasta las proximidades del embalse de Cúber se llevó a cabo sin dificultades. Sólo un burro se quedó rezagado porque su ritmo era más lento que el de los demás equinos. Un veterinario supervisó los animales antes de emprender la marcha hacia Lluc.

Lo hicieron por viejas rutas de montaña atravesando parajes