Unos mil ciclistas acudieron ayer por la mañana a la XXXIII Marxa Ciclista popular a les Piquetes des Pèlec de Llucmajor, una combinación de almuerzo, diversión y deporte que pasó por la plaza de Espanya, hasta el convento y la calle de Sant Francesc, desde donde los participantes emprendieron rumbo hasta la llegada, donde el Club Ciclista Llucmajor, organizador del evento, había preparado un refrigerio a base de botifarró y sobrasada para 1.100 corredores.

Una vez repuestas las fuerzas se procedió a entregar los premios a los ciclistas más joven y más veterano de la edición, un niño de tres años y medio y una señora que a sus 84 años logró completar los 4,5 kilómetros que separan la ciudad de las Piquetes. Asimismo se sortearon hasta seis bicicletas, dos de ellas donadas por La Caixa, dos más por Sa Nostra y otro par a cargo del ayuntamiento de Llucmajor.

La jornada de Sant Miquel también fue aprovechada para inaugurar una serie de exposiciones y para que los Cavallets Cotoners deleitaran al público congregado en la misa oficiada en honor del arcángel.