El Govern y la oposición se han culpado hoy mutuamente de la degradación de la zona turística de Magaluf, en particular de Punta Ballena, y de la imagen escandalosa que han ofrecido de ella medios de comunicación nacionales e internacionales durante este verano.
El conseller de Turismo, Jaime Martínez, ha recalcado en el Parlament que ha sido el Govern del PP durante esta legislatura el que, tras cuatro años de "inacción" de gestores de izquierda, ha afrontado la necesidad de favorecer la rehabilitación de Magaluf para que deje de ser el prototipo de destino turístico de ocio nocturno ligado a las drogas y el sexo.
"El modelo de Punta Ballena está destinado a desaparecerPunta Ballenaestá destinado a desaparecer", pero "un modelo turístico no se cambia de la noche a la mañana", ha dicho Martínez, quien ha asegurado que, "si tuviera herramientas legales", locales como el que acogió el concurso de felaciones que provocó el escándalo el pasado mes de julio "hoy estarían cerrados".
Por contra, la diputada del PSIB Isabel Oliver y el parlamentario de MÉS David Abril han atribuido a la pasividad del Govern del PP la mala imagen de Magaluf por la proliferación de ofertas turísticas para jóvenes británicos ligadas al consumo abusivo de alcohol y al sexo fácil.
Martínez, que ha echado en cara a sus dos interlocutores declaraciones "irresponsables" sobre Magaluf en reportajes sensacionalistas, ha hecho hincapié en que "los actos incívicos" denunciados "no son nuevos".
"En nuestra oferta turística no caben actitudes ni comportamientos que ensucien nuestra imagen", y por ello el Govern del PP ha iniciado un proceso de reconversión de zonas turísticas maduras como Magaluf "que no tiene marcha atrás", ha dicho. No obstante, también ha advertido que la oferta turística de ocio nocturno "de calidad" es algo consustancial al modelo vacacional de Baleares y que son muchos los empresarios que apuestan por él.
Martínez ha explicado que desde que se hizo público el vídeo de una joven practicando felaciones en un local a cambio de alcohol su departamento ha adoptado numerosas medidas para atajar esos comportamientos y paliar el daño a la imagen turística de Magaluf y el conjunto del archipiélago.
Entre ellas ha destacado la reunión con responsables consulares británicos y los llamamientos al civismo lanzados en el mercado del Reino Unido, el principal este verano para las islas, así como la realización de más de 400 inspecciones en locales de ocio de Magaluf por parte de las consellerias de Turismo, Trabajo y Salud.
Además, ha anunciado que se está preparando una acción promocional especial referida a Magaluf y Sant Antoni (Ibiza), las dos principales zonas de ocio juvenil vacacional, que se llevará a cabo en próxima feria World Travel Market de Londres.
"Hemos puesto las bases para cambiar el modelo turístico" pero "estaríamos más avanzados si antes se hubiera actuado", ha incidido el conseller, que ha contrapuesto las cifras de proyectos e inversión de reforma de hoteles de la actual legislatura con las de la pasada, en que se hicieron muchos menos.
La diputada socialista Isabel Oliver ha subrayado que la degradación de Punta Ballena y su mala imagen no responden solo a la difusión del vídeo de las felaciones, sino que "ha habido muertes" de jóvenes que caen de balcones de hoteles y "agresiones sexuales", a lo que se ha sumado la presunta "trama de corrupción" en la cúpula de la Policía Local de Calvià.
"Hacen falta políticas decididas para afrontar todo lo que ha pasado", ha incidido la parlamentaria, quien, en respuesta a los reproches de Martínez a las informaciones sobre Magaluf, ha afirmado que "esconder la realidad" es propio de "otro régimen".
David Abril, de MÉS, ha argumentado que Magaluf es "la consecuencia" de un modelo turístico sin liderazgo institucional en el que las empresas acumulan beneficios en zonas degradadas en las que apenas reinvierten.
"Aparte de inacción ha habido connivencia", ha denunciado el diputado de la coalición nacionalista.
