Luz al final del túnel. Una de las obras que más retraso acumula en el municipio de Llucmajor es la dotación de alcantarillado en Cala Pi, Vallgornera y es Pas. El alcalde, Joan Jaume Mulet (PP), entrevistado por este diario anuncia que el Ayuntamiento "tiene ya casi listo el proyecto para presentar a la conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, a fin de solicitar financiación vía Fondos Feder y Life en Europa, conjuntamente con el Govern balear". Se prevé que el presupuesto necesario para ejecutar tan demorada obra ascienda "a cerca de 13 millones de euros".

Jaume detalla que se trata de un proyecto "íntegramente de alcantarillado". Subraya que las cuevas de Vallgornera han de preservarse "puesto que tienen la calificación de Lugar de Importancia Comunitaria, LIC, tienen un interés medioambiental y científico y se han de proteger".

En este sentido, el alcalde llucmajorer es conocedor de que en las cuevas "no se puede verter ni una sola gota de agua residual".

Lo curioso y llamativo de todo este caso es que este proyecto de alcantarillado de Cala Pi, Vallgornera y es Pas supone una experiencia en Mallorca. Jaume explica que "aquí no se puede ejecutar un proyecto de alcantarillado tradicional, entendamos por ejemplo el reciente de s´Estanyol. En Cala Pi, Vallgornera y es Pas no se pueden enterrar tuberías en según que niveles porque no se pueden dañar las catalogadas cavidades. Por lo tanto, se tendrá que instalar un alcantarillado casi en superficie, es decir, enterrar como máximo entre un palmo y 40 centímetros. Esto es lo que hace que esta iniciativa que se va a emprender constituya un sistema novedoso, nunca se ha hecho en Mallorca y es muy costoso".

Con el objetivo de que tan elevada cantidad de millones de euros no tenga que correr al 100% por parte de los vecinos de la zona (más de 600 en estos tres núcleos), "pues se intentará abaratar el coste consiguiendo una subvención de la Unión Europea".

El deseo del alcalde es que este 2014 se acepte la subvención y en 2015, poder licitar este proyecto e iniciar los trabajos. Muchos vecinos y entidades ecologistas saben que el problema de esta zona de la costa es que la profundidad de las cloacas podría perjudicar o perforar algunos tramos de las cuevas de Vallgornera. Y la legislación obliga a dotar de alcantarillado. En caso contrario, el Ayuntamiento ve impedimentos a la hora de otorgar licencias de obras.