La Plataforma ciutadana Alta Tensió a Llucmajor se resiste a tirar la toalla. Es más, ahora intensifica sus acciones. La portavoz del colectivo de propietarios de fincas afectadas por el proyecto de Red Eléctrica de España, Marta Urbina, entrevistada ayer por Diario de Mallorca lamentó que el Govern balear "ya dé prácticamente por hecho el próximo inicio efectivo de las obras de dos tendidos aéreos", concretamente las líneas de 66 kV ampliable a 132 que enlazarían la subestación de la ciudad de Llucmajor hasta las inmediaciones del poblado prehistórico de Capocorb (en el camino de s´Àguila, en plena Marina) donde se construiría una nueva subestación (llamada Cala Blava en los planos), y la otra, desde este último punto hasta s´Arenal. El primer trazado afecta directamente a 180 fincas y prevé medio centenar de torres de hasta 40 metros de altura. El segundo invade 80 propiedades y se ´pintan´ unas 60 torres. A fin de impedir esto, la plataforma reclama que se aproveche la línea de 15kV ampliable a 66 que ya está construida, comprendida entre Son Antem y la futura estación Cala Blava.

Urbina señala que la plataforma no se conforma con la simple oferta que les han insinuado "de que las torres podrían tener finalmente un menor impacto estético del previsto, es decir, en lugar de tener una base de alrededor de 15 metros de diámetro habría sólo la estructura de la torre alzada".

Según Urbina, en relación al trazado ya existente que va desde Son Antem hasta la futura subestación Cala Blava, "no tiene ningún sentido malgastar millones de euros, perjudicando a muchos ciudadanos y destruyendo paisajes de valor para dar electricidad a apenas cinco abonados". La titular de esta línea es Gesa Endesa. La plataforma cree que "si la empresa corrige el impedimento por el que la conselleria de Economía y Competitividad denegó temporalmente la ampliación a 66 kV [desviar una torre porque la línea pasa por encima de una barraca] a fin de que esté registrada oficialmente como lo que es, una línea de 66 kV, se evitarían muchísimos daños".

Negociaciones

Urbina reivindica a la dirección general de Industria y Energía, encabezada por Jaime Ochogavía, "que ejerza su papel de árbitro, negocie con Gesa Endesa y REE y defienda los intereses generales". Advierte de que además de las fincas afectadas, "están en riesgo el turismo, la economía, la agricultura, la fauna y flora, y la salud".

La plataforma recuerda que el GOB propuso hace cierto tiempo la declaración ZEPA para la zona, con el objetivo de proteger a las aves. Esta demanda no fue aceptada. Especies como la milana podrían verse perjudicadas.

Asimismo, Urbina tacha de "obsoletas" y "engañosas" determinadas leyes y normativas. Apunta que hay ciudadanos que todavía desconocen el alcance real de estos proyectos. Por ello, la plataforma llucmajorera solicita también al Govern Bauzá que se paralicen el conjunto de planes de este tipo previstos en Balears "hasta que la dirección general de Industria y Energía termine las negociaciones con el Gobierno central para hacerse cargo de las líneas de 66 y 132 kV que están a cargo de REE, ante la posibilidad de que éstas pasen a ser gestionadas por la propia comunidad autónoma".

Urbina deja clara la postura de los residentes movilizados: "En caso de no poderse aprovechar y reforzar las infraestructuras existentes, que los trazados se hagan por caminos públicos y de forma soterrada, siguiendo el pertinente protocolo de anulación de campos electromagnéticos".