Los planes de Correos no gustan al ayuntamiento de Llucmajor. Quedó claro en el pleno del Ayuntamiento celebrado ayer. El PP, que gobierna con mayoría absoluta, presentó una moción que fue respaldada por el resto de partidos: PSOE, PSM, ASI y PI. Los acuerdos: "El Ayuntamiento agotará todas las vías para reponer la decisión de la empresa Correos de cesar el reparto postal domiciliario en las urbanizaciones de Las Palmeras, Tolleric, Cala Pi, Vallgornera, es Pas de Vallgornera, s´Estanyol y Son Bieló". A su vez, el consistorio "insta a la Sociedad Estatal de Correos y Telégrafos al restablecimiento del servicio de correo ordinario puerta a puerta en dichas urbanizaciones al no concurrir la consideración de entornos especiales". Paralelamente, el pleno mostró su rechazo a posibles "discriminaciones", como que puedan repartirse cartas en edificios plurifamiliares pero no en viviendas unifamiliares. Por ello, se ha decidido recurrir a la Justicia.

Concretamente, el pleno también aprobó por unanimidad que el Ayuntamiento interponga un recurso contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional contra los acuerdos de 11 y 13 de marzo de 2014 de la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC), que afectan a los citados núcleos.

Los partidos con representación en el Ayuntamiento defienden el "derecho" de los ciudadanos de ser informados y recibir las cartas, advirtiendo de que no puede haber discriminaciones dentro de una misma localidad.

El PSOE lamentó que el PP no hubiese actuado con más celeridad a fin de evitar la "alarma social" creada. El alcalde, Joan Jaume Mulet (PP), respondió al líder del PSOE, Joan Jaume Sastre (primo suyo), que fue en tiempos del Gobierno Zapatero, en 2007, cuando se aprobó el polémico Real Decreto que preveía una serie de actuaciones sobre los repartos en general. En este sentido, el alcalde reprochó que el PSOE tampoco se movilizara antes.

En cualquier caso, todas las formaciones hacen frente común en este asunto. Reivindican que Correos replantee sus intenciones. El alcalde divulgó que otras zonas de Balears y de España son objeto de los mismos cambios que se pretenden en Llucmajor. No obstante, reiteró: "No podemos llegar a entenderlo. Hay cosas que no se explican. Son núcleos urbanos tradicionales de toda la vida, con volumen demográfico suficiente para hacer el reparto postal ordinario y, además, si un repartidor entrega a edificios plurifamiliares no debe resultar tan complicado realizar lo mismo con el resto de viviendas".

Si finalmente Correos aplica su criterio, el servicio postal domiciliario sería sustituido mediante los llamados ´casilleros concentrados pluridomiciliarios´, es decir puntos determinados con buzones de los residentes. En verano, estas localidades multiplican población.