Una de las tradiciones más genuinas de la diada de Sant Joan volvió a exhibir su encanto. A la salida del sol, a las 6,20 de la mañana, 25 niños y niñas, de entres dos meses y seis años de edad, participaron en el ritual de s´Hort des Correu de Manacor. Procedían de Manacor, Palma, Marratxí, Inca, Felanitx y Sant Llorenç, entre otros municipios. El objetivo: pasar entre las ramas cortadas de los vimers para curar sus hernias. Todo ello con la ayuda de la luz natural de este día tan especial, verano recién estrenado: 24 de junio.

En 2013 acudieron 22 niños, de los que sanaron 20. La familia que mantiene tan singular costumbre sigue un cuidado protocolo y la implicación de los padres y las madres es fundamental. Es gratis, si bien los donativos voluntarios son habituales. Bàrbara Suñer considera clave que la gente "crea en este milagro, si no es así no es necesario que se acerquen porque no resultará efectivo".

Se desconoce la fecha exacta en la que comenzó a celebrarse este ritual, aunque la manacorina Suñer, de 79 años, apunta que se lleva a cabo "desde hace más de un siglo". Los portadores principales (los que friegan las ramas sobre las hernias) son Miquel Sureda (padre del suegro de Suñer, ya fallecido), Jaume Sureda (esposo ya fallecido), Sebastiana Sureda (una de sus hijas) y Sílvia Sureda (una de sus nietas). Cuentan con ayudantes. S´Hort des Correu es propiedad de la conocida familia Servera (de las Coves del Drach). Se ubica junto a la rotonda de salida de Manacor hacia Porto Cristo.

Suñer vive en s´Hort des Correu desde que se casó, y se ocupa de la finca no sin esfuerzos. Reconoce que teme si un día ha de dejar de residir aquí y se pierde tan ancestral costumbre. "Mientras pueda la conservaremos", subraya.

A los progenitores de los niños ungidos con la savia de los vimers se les desaconseja el contacto con el agua durante dos días. El ritual marca sus condiciones y el deseo es esquivar el quirófano. Si las ramas brotan: curación efectiva.

Siguiendo en la comarca del Llevant, en Sant Llorenç, Sant Joan Pelut fue interpretada por Biel Nicolau. Hubo misa, ofrenda del baile y recorrido con dimonis i sonadors. Como novedad: niños entregaron sus chupetes al vistoso santo. La nota emotiva: las palabras de recuerdo hacia Jeroni Llambies, rector recientemente fallecido. Ofició el artanenc mossèn Joan Servera. En el municipio vecino de Son Servera se honró al patrón con misa solemne, conciertos y refrigerio.

Pasando al Migjorn, en Felanitx Sant Joan Pelós llenó de música y baile las calles. Por quinto año consecutivo, Sebastià Barceló Guingaia encarnó al personaje, emocionando con sus saltos, cabriolas y giros. Se repartieron claveles. Fiesta única reivindicada como de Interés histórico cultural.

Y en el Pla, la Associació de mares i pares de Sant Joan y el colegio público Son Juny culminaron la típica Festa del sol que balla. Diversos actos de entretenimiento atrajeron a jóvenes y mayores. Por la tarde salieron dimonis, xeremiers i flabiolers. Después de la misa, irrupción nocturna de Sant Joan Pelós y el Corb de Sant Nofre.