El interrogante que tienen los vecinos de El Toro (Calvià) sobre cuál es la administración responsable de que el acceso a la calita siga cerrado casi un año después de que se precintase por el riesgo de desprendimientos se ha incrementado al recibir una notificación de Demarcación de Costas en Balears, que atribuye la responsabilidad al Ayuntamiento.

En la respuesta enviada a los residentes, que pedían explicaciones por el cierre del acceso y recordaban la obligatoriedad normativa de garantizar el paso al litoral, Costas se ampara en que el cierre "lo efectuó en su día el ayuntamiento de Calvià en virtud de las competencias que le confiere" la Ley de Costas.

Este organismo recuerda que la decisión municipal vino motivada "tras producirse ciertos desprendimientos en el talud anexo y tras constatar el Consistorio la peligrosidad potencial para los usuarios de la zona".

Los vecinos que se han movido para reivindicar la reapertura de este acceso subrayan su "inquietud" al ver que tanto el Ayuntamiento como Costas "se van remitiendo de una a otra administración en relación a la responsabilidad del cierre y la conculcación del derecho de acceso al mar sin haber mostrado su disposición a solucionar un tema cuyo coste y dificultad técnica son mínimos". En su día, el Consistorio informó de que había balizado la zona de desprendimientos con el consenso de Demarcación de Costas. Sin embargo, el Ayuntamiento precisaba que el organismo competente para ordenar el restablecimiento del acceso a la calita debía ser Costas, ya que entre las competencias municipales en el área de litoral únicamente figuraban "mantener las playas y lugares públicos de baño en las debidas condiciones de limpieza, higiene y salubridad, así como vigilar la observancia de las normas e instrucciones dictadas por la Administración del Estado sobre salvamento y seguridad de las vidas humanas".

En su respuesta a los vecinos, Costas precisa que está "en contacto" con el Ayuntamiento "para encontrar una solución que permita, al menos, un acceso alternativo". De hecho, el Ayuntamiento trabaja en un acuerdo entre tres bandas, que, además de a la administración municipal, implicaría a Ports de les Illes Balears (IB) y a Port Adriano. La alternativa pasaría por desplazar el paso actual, para que no esté pegado a un talud donde se han producido los desprendimientos de piedras que motivaron el cierre.