Sineu se ha marcado el objetivo de lograr la apertura de los edificios religiosos más importantes del pueblo durante varias horas y días a la semana para fomentar la actividad turística en el municipio. Es uno de los retos marcados en el Plan de Desarrollo Turístico, aprobado el pasado lunes en el pleno municipal, que tiene la finalidad de definir acciones y estrategias para potenciar el municipio como un destino turístico atractivo más allá de la temporada alta y del mercado de los miércoles, la jornada turística por excelencia en la histórica localidad del Pla de Mallorca.
El plan, que fue aprobado con los votos a favor del equipo de gobierno PP-Convergència y en contra de la oposición, contempla además otras iniciativas como la creación de una marca turística propia y la edición de folletos de promoción en diversos idiomas. También establece la "recomendación" de crear un museo rural en el pueblo como "valor añadido", aunque admite que este proyecto es "complicado" por la actual situación económica, por lo que abre la posibilidad de implicar a posibles patrocinadores privados.
Potenciar el ciclismo como producto turístico; mejorar el mercado de los miércoles, incluido el de los animales; aplicar reformas circulatorias e instalar paneles informativos en los edificios más emblemáticos son algunas de las propuestas que se incluyen en el documento, que "se irá desarrollando poco a poco, pero sin pausa", según señala el alcalde Pere Joan Jaume (PP).
Por su parte, la oposición rechaza el plan turístico porque en su elaboración "no han colaborado entidades locales, empresarios ni el sector de la restauración" y porque "parece que se hace solo para dar cumplimiento a una orden de la conselleria de Turismo de cara a las elecciones de 2015", según los Sineuers Independents (SI). Este grupo critica que el plan no incluya una memoria económica ni un calendario de ejecución y expresa sus sospechas de que "en la práctica, el plan solo supondrá la edición de folletos de información turística, ya que en el presupuesto solo se detalla una partida de 20.000 euros en propaganda y publicidad turística".
Aprobación del presupuesto
Por otra parte, el pleno aprobó también el presupuesto de 2014 con los votos a favor de PP y Convergència y en contra de SI y PSOE. Las cuentas ascienden a 2,55 millones de euros y, según el alcalde, "son realistas y estudiadas minuciosamente área por área para gestionar el día a día del municipio".
El capítulo de inversiones incluye una partida de 269.564 euros para realizar diversos proyectos de pequeña envergadura como la mejora de la instalación del aire acondicionado en el Convent de Mínims, la reforma del Abeurador, la restauración del tejado de la Quartera o la colocación de nuevas papeleras en el casco antiguo de la localidad. También se destinarán 115.000 euros al pago de una expropiación de una zona verde en Sa Farinera, una "herencia" de anteriores gobiernos locales, según Jaume.
La oposición rechazó los presupuestos presentados por el equipo de gobierno porque, a su entender, "demuestran la inactividad" del Ayuntamiento, que no prevé grandes proyectos "a pesar del superávit existente".
