Hacer rehabilitación pronto será muy cómodo. Cualquiera que haya tenido un accidente o enfermedad y haya precisado de sesiones de fisioterapia comprenderá lo engorroso que es acudir cada día al hospital para desarrollar una tabla de ejercicios. ¿Pero qué pasaría si le dijeran que puede hacerlo en casa con la supervisión de su médico? Esta idea ya la está desarrollando el Hospital Comarcal de Inca.

El Servicio de Rehabilitación está llevando a cabo ya la fase inicial de un programa que permite a los pacientes que precisan ejercitar las extremidades superiores efectuar los ejercicios en casa. Con este objetivo han adaptado una serie de juegos de ordenador y otros diseñados exprofeso para que el paciente tenga que realizar una serie de ejercicios con los que resolverlos.

Todo lo que se necesita es un ordenador, un sensor de movimiento (que puede ser de una consola de videojuegos) y una conexión a internet. El paciente accede a una web y allí, con la clave proporcionada por su terapeuta, accede a una rejilla de videojuegos. El joystick es el paciente y el movimiento de sus brazos hace desplazar las imagenes. El juego premia, igual que los reales, los aciertos y aumenta la dificultad.

Cada vez que el paciente efectúa una sesión, el programa informático transmite los resultados al médico o al terapeuta que evalúa la rapidez de movimientos, el tiempo, el nivel de esfuerzo, etc.

Javier Oddo es uno de los primeros pacientes que trabaja con este cómodo sistema. Asegura que desde que participa en el programa experimental nota "que el avance es mucho más rápido que con el convencional". Sin embargo, lo que más alaba es "la comodidad de hacer los ejercicios en casa, en el horario que me vaya bien y en fin de semana".

La aplicación de este programa no sólo aporta comodidad al usuario sino que permite optimizar recursos. "Muchos más pacientes pueden hacer rehabilitación a la vez porque ya no necesitan ir físicamente al hospital", indica Gloria Cardenal, terapeuta ocupacional.

Listas de espera

La doctora Susana Holub, jefa del Servicio de Rehabilitación, tiene grandes esperanzas en el sistema porque "permitirá atender a miles de pacientes de parkinson de grado dos o tres que ahora no podemos acoger. También ayudará a acabar con las listas de espera o paliarlas".

El paciente necesita tener unos mínimos conocimientos de usuario de ordenador aunque "seguramente si es una persona mayor sus hijos o nietos podrán enseñarle en menos de diez minutos", explica Francisco Baos, supervisor de fisioterapia. En breve se pondrá en marcha otro programa para ejercitar las extremidades inferiores.