Durante la primera quincena de enero sa Pobla registró un aumento de delitos contra la propiedad, en su mayoría robos. Con el objetivo de disuadir futuras actuaciones delictivas se activó un dispositivo especial, que llevaron a cabo de manera conjunta la Policía Local y la Guardia Civil.

La campaña de prevención consistió, por una parte, en el control de vehículos a los que se les solicitó la documentación y por otra, a la presencia de agentes en zonas de gran afluencia.

El resultado se ha traducido en la denuncia de 38 personas por no tener la documentación del vehículo en regla, dar positivo en el control de alcoholemia y por incumplimiento de las ordenanzas. Hay que sumarle la denuncia de tres personas por robo de material eléctrico y otras tres por hurto de productos agrarios.

La campaña de prevención fue presentada ayer por el alcalde, Biel Serra, el concejal de Policía, Xisco Terrassa, el Brigada de la Guardia Civil, Francisco Martínez y el jefe de Policía, Toni Borràs.

Asimismo, se dio a conocer que desde principios de año está en funcionamiento el programa informático Drag que permite que ambos cuerpos policiales tengan conocimiento de los vehículos que tienen antecedentes delictivos.