Ni el equipo de gobierno ni la oposición del ayuntamiento de Manacor alcanzan a entender lo sucedido, el cambio de criterio del Jurado Provincial de Expropiación que resuelve que el consistorio debe pagar 14,7 millones de euros por una zona verde que hace un año, el mismo órgano, tasó en 82.500 euros. La decisión, que el ayuntamiento de Antoni Pastor piensa recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), beneficia a un reducido grupo de empresarios locales que en octubre de 2009 compraron el solar por 1,8 millones y que dos semanas después pedían su expropiación forzosa a cargo de las arcas municipales por 7,8.
"Estamos indignados pero a la vez confiados que al final la Justicia sabrá resolverlo", explica el regidor de PSM-Entesa, Miquel Oliver, "no parece lógico un cambio de criterio en un jurado tan solo un año después. Hay que intentar parar estos casos que lo único que hacen es beneficiar a empresarios, en este caso Javier Suasi, Jaume Lliteras, las hermanas Maria y Antònia Mascaró y Sebastià Nadal (padre del tenista Rafel Nadal, a través de la empresa Goramendi Siglo XXI SL, de la cual es administrador único), que se aprovechan de un vacío legal para ir en contra del resto de manacorins". "Estos puede hipotecar la inversión del Ayuntamiento durante muchísimos años".
El concejal de Esquerra, Joan Llodrà, incluso va más allá: "en Islandia hay gente en la cárcel por cosas similares, si la ley no les envía la que está mal hecha es la ley. Los más ricos de Manacor tienen unas ganas insaciables de dinero y pueden pagar ese dinero para comprarla y tener la seguridad que va a sacar rendimiento... no se trata de una finca que les ha venido de herencia".
La portavoz del PSOE, Amanda Fernández es más cauta al respecto: "parece a simple vista un caso claro de especulación, pero aún no hemos tenido tiempo de consultar toda la documentación. En todo caso, pienso que además se trata de una gestión urbanística nefasta por parte del señor Pastor, que ha ido dejando pasar el tiempo alargando el problema".
De hecho la oposición conoció el problema concreto este mismo lunes, minutos antes del pleno ordinario de diciembre. Ayer a primera hora cada grupo pudo ir a recoger la documentación complementaria con todos los detalles del caso de esta zona verde, situada en la denominada Torre Florida, entre el barrio del Serralt y lo que pronto será la residencia y centro internacional de tenis Rafel Nadal.
El Jurado Provincial de Expropiación sin embargo, en 2010, no fue tan favorable con varios de los mismos propietarios, que ya pidieron 41,8 millones de euros al Ayuntamiento por otra zona verde que confronta con la conocida como rotonda del cilindro. En aquella ocasión se determinó un justiprecio de 141.660 euros, al ser valorados en referencia a su situación rural.
El cambio en la Torre Florida ha venido determinado porque el jurado ha entendido que ahora, sin cambios urbanísticos de por medio, los terrenos han pasado de rústicos a urbanos consolidados.
