Sant Llorenç vivió ayer el I Mercat gastronòmic del Bolet. Durante el fin de semana, la estación del tren fue escenario de este nuevo y sugerente evento. Unos quince estands participaron, en ellos se podían encontrar varios y diversos ejemplares de setas, mayoritariamente procedentes de fuera, ya que esta temporada no ha sido productiva en la isla. Llamaron la atención las típicas trufas, algunos ejemplares venidos incluso del Canadá, o el fuet de setas.
Además del mercado, se celebraron unas jornadas gastronómicas en las que participaron diversos cocineros de renombre de toda la isla, divulgando suculentas recetas rápidas. Los más pequeños también tuvieron la oportunidad de realizar talleres para elaborar setas con arcilla y pintarlas. El mediodía estuvo eclipsado ante la degustación de platos elaborados con bolets que concentraron a muchos comensales.
La diada del sábado, en cambio, era destinada a profesionales del sector de la gastronomía y aficionados a la cocina de las setas.
