El proyecto de mercado artesanal de Santa Ponça, en Calvià, sigue en el limbo más absoluto. No se sabe si va para adelante o para atrás. La Asociación de Comerciantes de la localidad, recientemente creada, se ha mostrado en contra del proyecto presentado por el Ayuntamiento por la competencia que supondría para sus negocios. Pero, por lo que se comenta en el núcleo, su opinión no es la única. Un grupo de bares y restaurantes ha comenzado a movilizarse en defensa del mercado, al entender que inyectaría actividad económica a una localidad donde en invierno resulta imposible encontrar un hotel abierto.

Desmontando el ´mito´ del regidor Ortega

Compañeros de equipo de gobierno del regidor de Deportes de Calvià, Enrique Ortega (PP), bromeaban ayer con él sobre su apuesta por la bicicleta como medio de moverse por el núcleo del cual es concejal, Son Caliu, para así estar más en contacto con los vecinos. Algunos desmontaban riendo ese ´mito´ recordándole que no es lo mismo moverse sobre dos ruedas por las calles llanas de Son Caliu que por las empinadas cuestas que se encuentran en localidades como Santa Ponça o Portals Nous, por poner sólo unos ejemplos. Y ahí hay que darles la razón: un concejal sudoroso hincando los riñones en cada pedalada para subir una cuesta a fin de hablar con un vecino quejoso sí que sería un ejemplo de sacrificio y entrega.

La ´guerra de la pelota´ en Esporles

La pelota es motivo de encuentro, de diversión y de ejercicio. Pero, a veces, no es sinónimo de nada de eso. Lo saben en Esporles, donde el Ayuntamiento ha tenido que terciar en los incidentes que se han originado en la Placeta entre los juegos que desarrollaban niños pequeños y otros mayores, amantes del fútbol. En las redes sociales, ha recordado que para jugar al balompié están los patios de la escuela y del instituto.