El anuncio del pasado viernes por parte del Govern, de que se invertirán 5,5 millones de euros en una ´vía verde´ para uso lúdico y turístico en lo que debía ser la recuperada línea ferroviaria de Manacor-Artà ha provocado la reacción de rechazo de la Associació d´Amics del Ferrocarril.
Según la entidad, defensora del ferrocarril como servicio para toda la ciudadanía, "palabras como turismo ecológico y sostenible aplicadas a esta infraestructura esconden el reconocimiento de que el ferrocarril es el mejor sistema de transporte sostenible para la comarca y afirmaciones como que el coste es inasumible entendemos que son parciales ya que no informan sobre el verdadero coste de hacer y mantener las carreteras, los servicios para el transporte privado y los costes externos en contaminación o accidentes que provoca el automóvil".
Transporte público efectivo
Amics del Ferrocarril siempre ha defendido que "el transporte público en Mallorca no será realmente efectivo hasta que no se acabe la conexión de Palma con los principales centros de turismo; tanto del Llevant (Artà-Cala Rajada) como del norte (Port d´Alcúdia). Este es un retraso histórico que ahora teníamos la oportunidad de recuperar y que el Govern aborta sin justificación seria y con la oposición de los municipios".
Asimismo, admite que es partidaria de ´vías verdes´ para "ciertas líneas abandonadas del ferrocarril, pero sólo en los casos en que efectivamente la reimplantación del servicio no sea posible por haber ya revertido los terrenos a propietarios privados o bien porque el coste de rehacer la infraestructura no compense la demanda social de transporte. Podría ser el caso de la antigua línea Arenal-Llucmajor-Campos-Santanyí o de algunos de sus tramos, pero no es el caso de la de Manacor-Artà, ya prácticamente construida y con el material móvil a punto de ser utilizado. Si no se puede electrificar ahora que se haga más tarde y que se use el material de Manacor para llegar a Artà". Por todo ello, Amics del Ferrocarril (presidido por Miquel À. Riera Ximenis) pide una "reconsideración" de este proyecto y confía en que las autoridades públicas encaren con responsabilidad la conclusión y puesta en funcionamiento de la línea del Llevant.
