La semana pasada empezaron los trabajos de excavación de la cueva prehistórica situada en el Camp del Bisbe, una finca situada en las cercanías de la rotonda de la carretera de Costitx, a unos 350 metros a la salida de Sencelles. Se trata de un yacimiento arqueológico catalogado como cueva natural de enterramiento de la época talayótica.

Las primeros trabajos han dado resultados muy esperanzadores. En palabras de la joven arqueóloga de Sencelles, Lua Valenzuela: "Hemos empezado las labores de desalojo de las piedras y la tierra removida del interior de la cueva y, a parte de encontrar cerámica del siglo XVIII, ya han ido apareciendo restos prehistóricos".

Es preciso recordar que la parte más profunda de la cueva tiene una pared de cerramiento hecha con piezas de marés porque fue reutilizada a posteriori como establo y cobertizo.

"Ahora estamos sacando la tierra y las piedras que seguramente se pusieron para conseguir nivelar el suelo hasta que encontremos la roca madre, y los resultados, en cuanto a restos, ya son bastante evocadores", destaca Lua Valenzuela. De hecho, era la parte interior de la cueva la que menos interés despertaba entre los arqueólogos ya que su utilización continuada en siglos posteriores hacía presagiar que no se hallarían restos antiguos, o si fuera el caso, estarían muy deteriorados.

La entrada de la cueva es donde se concentraban mayores esperanzas, ya que se trata de una zona que ha sufrido hundimientos del terreno y que no ha tenido intervenciones humanas posteriores por lo que los sedimentos habrían tapado y ayudado a conservar los posibles restos.

Segunda fase

En esta parte de la boca de la cueva no se intervenido aún y, según Valenzuela, "seguramente daría para un mes más de intervención arqueológica, que podríamos dejar para una segunda fase. Ahora vamos a centrarnos en la parte cerrada del interior".

La intervención arqueológica cuenta con los permisos de la Comisión de Cultura y Patrimonio del Consell y está a cargo de tres codirectores: Lua Valenzuela, Miquel Abraham y Bea Palomar.

Los trabajos se desarrollan de martes a sábado, en horario de mañana y está prevista su finalización el 28 de junio.

La intervención cuenta con un presupuesto de 7.000 euros aportados por el ayuntamiento de Sencelles y la Fundación Mossèn Bartomeu Oliver.

Propiedad

Precisamente la finca conocida como el Camp del Bisbe, donde se halla la citada cueva de enterramiento, es propiedad de la fundación mencionada.

El Ayuntamiento ha hecho dos llamamientos para captar voluntarios que ayuden en los trabajos de campo de la excavación. Ha habido personas que han llamado interesándose por participar pero estando en época de exámenes y en horario de mañana, muchos han desistido.