La Policía Local de Alcúdia ha llevado a cabo una curiosa campaña informativa durante el último mes. Varios agentes han estado visitando las casas del casco antiguo de la ciudad para pedir a los vecinos que cierren la puerta de sus viviendas durante el día.

En esta zona de Alcúdia, plagada de plantas bajas y con muchos vestigios de arquitectura medieval, subsiste aún la costumbre de abrir la puerta de la casa y mantenerla así durante el día.

Abelardo Mesias, subinspector de la Policía Local, explica que "durante el primer trimestre del año se sucedieron muchos robos al descuido, aprovechando que la puerta de las casas estaba abierta".

La investigación policial ha dejado al descubierto que se trata de una pandilla de individuos de origen magrebí que usan a un menor para cometer los robos. La forma de actuar es que el menor de edad se introduce en una casa y roba objetos de valor o antigüedades. En este tipo de viviendas son numerosas pues se trata de moradas de gente mayor que posee auténticas reliquias antiguas legadas por sus antepasados.

El autor de los robos se cuela en las casas vecinas saltando las tapias de los patios. Mesias puntualiza que "se han dado casos de robos múltiples en muy poco tiempo que han afectado a casi todas las casas de una calle".

Los miembros mayores de edad de la pandilla se encargan de vender la mercancía robada.

El menor, autor de los robos, fue capturado hace unas semanas por los agentes de la policía de Alcúdia. Sin embargo, fuentes locales sostienen que tras ser puesto a disposición de las autoridades competentes ya ha sido puesto en libertad.

Los vecinos secundan la petición policial pero los que han sido víctimas de robos están atemorizados, según ha podido comprobar personalmente Diario de Mallorca.

La Policía Local ha reforzado la vigilancia en las zonas afectadas del casco antiguo. Se ha incrementado la presencia con una patrulla más de policía en bicicleta los viernes y sábados, que es cuando han ocurrido la mayoría de robos.