El acto institucional de la entrega de las insignias ´Brot de Pi´, que abre la fiesta del Vi Novell de Santa Maria, ha tenido este año un carácter emotivo. El premio que se concede a las personas que han destacado dentro del mundo del vino, otorgado por los bodegueros del municipio, ha sido entregado por unanimidad a título póstumo a Sebastià Pastor, propietario de las bodegas del mismo nombre, que falleció el pasado mes de agosto en un desgraciado accidente laboral que conmovió a toda la localidad de Santa Maria. El premio fue recogido por su hijo Sebastián, que no pudo disimular la emoción al dirigirse al numeroso público que llenó la sala de plenos del Consistorio. En la imagen, la familia Pastor, durante un momento del acto institucional.