La ponencia técnica de la comisión insular de Urbanismo del Consell de Mallorca emitió ayer un informe favorable a la concesión del interés general al proyecto de construcción de un campo de golf en la finca de Son Saletes, situada entre los municipios de Sencelles y Binissalem. En consecuencia, todo indica que la decisión política de la citada comisión urbanística será favorable a la declaración de interés general en la reunión prevista para el próximo viernes día 28 de septiembre, por lo que la construcción del macroproyecto urbanístico en suelo rústico tendrá luz verde a pesar de la oposición de los ayuntamientos afectados, Binissalem y Sencelles, que han aprobado normativas contrarias a la instalación de campos de golf.

El proyecto del campo de golf de Son Saletes, en tramitación desde el pasado año 2005, es promovido por el presidente del PP local de Sencelles, Ventura Rubí, que también es el padre de la actual secretaria de Comunicación del gabinete de la presidencia del Govern, Helena Rubí Cano, una de las personas de máxima confianza del president José Ramón Bauzá.

La declaración de interés general por parte del Consell choca frontalmente con la oposición de los municipios afectados, por lo que el conflicto de intereses está servido debido a la duda existente sobre si pesa más la declaración del Consell o la no concesión de licencia urbanística por parte de los citados consistorios, una cuestión que, según ha podido saber este diario, provocó un serio debate en el seno de la ponencia técnica celebrada ayer.

Dudas legales

Las fuentes consultadas por este medio creen que el interés general concedido por el Consell es un argumento suficiente para la autorización definitiva del proyecto, independientemente de las resoluciones adoptadas por las instituciones municipales. Una de las fuentes explicó que "el inicio de la tramitación del golf es más antigua que la declaración contraria a estas instalaciones por parte de los dos ayuntamientos" y que "existen sentencias que defienden que la tramitación de un proyecto no quedará afectada por la aprobación de normativas sobrevenidas". Otras voces añaden que la licencia "no podrá ser denegada a no ser que surja algo inesperado como, por ejemplo, un problema con el agua de riego" y que un interés general prevalece sobre cualquier otra resolución administrativa.

Por su parte, el alcalde de Sencelles, Joan Carles Verd (CxI), recuerda que su municipio ha modificado la normativa para prohibir este uso en suelo rústico y está convencido de que "la última palabra es del Ayuntamiento". Cabe recordar que el equipo de gobierno de Sencelles aprobó el pasado mes de abril un cambio en las Normas Subsidiarias para prohibir los campos de golf, trámite que todavía está pendiente de informes de la comisión balear de Medio Ambiente, una tardanza que provoca ciertas suspicacias en la institución municipal. En 2009, el mismo Ayuntamiento ya decretó una moratoria contra el proyecto.

Por su parte, el consistorio de Binissalem también aprobó en diciembre de 2008 una modificiación de las Normas Subsidiarias para vetar la construcción de campos de golf. El PP votó a favor de la prohibición.

Consultado por este diario ayer, el alcalde de Binissalem, Jeroni Salom, actual presidente del PP de Mallorca, optó por lavarse las manos sobre el proyecto urbanístico con el argumento de que sólo una pequeña parte de las tres fincas sobre las que se construiría el golf está situada en su municipio. "Este terreno seguirá siendo rústico y no se tocará ni un árbol", aseguró el edil de Binissalem, convencido de que el proyecto afecta solamente al municipio vecino de Sencelles.