­El alcalde de Pollença, Tomeu Cifre (PP), sigue cosechando críticas por la aplicación de la ordenanza de ocupación de la vía pública. En esta ocasión, vendedores de mercados han presentado una serie de denuncias ante el Ayuntamiento por lo que consideran una aplicación irregular de la ordenanza tanto en la plaza Major de Pollença como en la plaza Miquel Capllonch del puerto.

El pasado 5 de junio se registró en el Consistorio ´pollencí´ una denuncia manuscrita por parte de un comerciante de mercados de la localidad, en la que reprocha a la institución local la "permisibilidad" de la ocupación de los puestos del mercado "por comerciantes no ambulantes", además de permitir la ocupación de la vía pública a vendedores que no cuentan con licencia de actividad ni permiso para ocupar los espacios públicos.

También denuncia la "venta de dos licencias incompatibles entre sí", ya que, según el denunciante, una de estas licencias corresponde a un vendedor ambulante y la otra a una cafetería, y ambas ocupan el mismo espacio público, lo que provoca un "conflicto permanente" entre locales y vendedores ambulantes "por culpa del Ayuntamiento".

Otra irregularidad afectaría a una serie de comerciantes ambulantes que habrían sido obligados a trasladarse de puesto en contra de su voluntad.

En la citada denuncia, se critica la gestión del alcalde y de varios concejales municipales por "no cumplir con sus obligaciones de fijar las condiciones por las que debe haber un correcto y ordenado desarrollo de los mercados y de la ocupación de la vía pública" y de "modificar a su arbitrio las condiciones de las autorizaciones administrativas para ejercer la actividad de la venta ambulante en los mercados semanales".

Por todas estas razones, y ante "la negligente actuación municipal", el denunciante reclama una compensación por daños y perjuicios al considerar que su actividad económica se ha visto seriamente perjudicada por la actuación municipal. "Los comerciantes no son respetados en el ejercicio de sus derechos y se ven en una situación de absoluta inseguridad jurídica ante las actuaciones arbitrarias, fraudulentas y discrecionales de los regidores delegados de los mercados de Pollença y el puerto", subrayan los vendedores.