­El equipo de gobierno municipal de Valldemossa (GIV, LVqV y CxI) acusa al PP de cometer "irregularidades" en la contratación de una obra en 2006-2007, a finales de última legislatura en que los populares ostentaron la vara de mando. En concreto, se trata de la reforma de la tercera planta de la Fundació Coll Bardolet, un espacio que es de titularidad municipal.

La empresa que realizó las obras para el ayuntamiento denunció a la institución en 2010, ya que entonces no había cobrado. Las reformas ya se habían realizado, pero en el consistorio no constaba ni certificación ni presupuesto.

La constructora demandó a los responsables municipales –ya gobernaba el actual tripartito– y reconoció en su escrito de acusación que la contratación, realizada durante el mandato del PP, "tuvo lugar de manera verbal, sin constancia alguna de que el Ayuntamiento de Valldemossa haya seguido los trámites de la Ley de Contratos del Sector Público, toda vez que ninguna habilitación fue solicitada ni presupuesto de ejecución".

La factura de las obras, que finalizaron en la propasada legislatura, ascendía a 54.000 euros. El ayuntamiento se negó a abonarlos en repetidas ocasiones, alegando que no había documentos justificativos de la contratación. Fuentes municipales señalan que el equipo de gobierno tripartito optó por llevar el caso a los tribunales al ser "la única manera de que el ayuntamiento se cubriera las espaldas", ya que sino podrían haber recibido una denuncia posterior por abonar tal suma de dinero sin ajustarse a ley.

La Justicia ordenó el pago de las obras, ya que quedó demostrado que sí se hizo la reforma de la planta tercera en la sede de la Fundació Coll Bardolet y que la empresa demandante fue la que ejecutó los trabajos. De esa forma, la orden judicial sirvió como prueba del pago. El fallo también indicó al Ayuntamiento de Valldemossa que podría ejercer acciones judiciales contra quien entonces gobernaba –el Partido Popular– para aclarar quién ordenó la ejecución de las obras "de manera verbal" y sin seguir los pasos legales.

El equipo de gobierno tripartito de Valldemossa desestimó en su día presentar una denuncia ante los tribunales para aclarar tal cuestión, al entender que "solo serviría para aportar leña al fuego de forma innecesaria", según señalaron fuentes municipales a este diario.

La sede de la Fundació Coll Bardolet fue rehabilitada hace años gracias a la colaboración del Govern balear. Allí se hizo una gran obra para adaptar como museo una casa del centro de la vila. La tercera planta del edificio fue cedida al ayuntamiento. Las reformas realizadas por el consistorio hacia 2007 –y posteriormente denunciadas– sirvieron para ultimar los acabados de la sala y habilitarla para la realización de exposiciones municipales.

La resolución judicial que ordenó el pago de los 54.000 euros a la constructora se produjo a mediados de 2010. El ayuntamiento ya ha abonado la cantidad a la empresa que ejecutó las obras. Esta polémica se hizo pública ayer, tras la denuncia realizada por el PP de Valldemossa el pasado lunes sobre "irregularidades" en la contratación de la empresa que gestiona la escoleta municipal.