El Jardí Botànic de Sóller ingresó hace unos días un total de 63.000 euros del Consell de Mallorca. Con este aporte la entidad mitiga su delicada situación económica, según reconocieron ayer los directivos de este organismo.
Tanto el presidente, Andreu Ramis, como el director gerente, Josep Lluís Gradaille, se mostraron "muy agradecidos" por el dinero recibido por el Consell "que nos ayuda a paliar la situación económica" de la institución museística.
En especial, se mostraron satisfechos con la mediación de la consellera insular Catalina Soler para que el organismo insular abonara parte del dinero que le adeuda desde el año 2010.
Tal y como avanzó ayer este periódico, el Jardí Botànic está elaborando un programa para la racionalización del gasto debido a las dificultades económicas que sufre debido al impago de las ayudas comprometidas por la administración y otras entidades.
Entre otras medidas, el plan de ajuste prevé reducir la jornada de trabajo de los operarios en el caso de que no mejore la liquidez de la institución.
El presidente de la entidad, Andreu Ramis, explicó que la entidad museística cerró el ejercicio de 2011 con un déficit de 330.000 euros. Ramis señaló ayer que "nuestra intención es no aplicar el plan de recorte de gasto siempre y cuando nos abonen el dinero comprometido".
Una institución enraizada
Tal y como se informa en su página web, el Jardín Botánico de Sóller inició su andadura en el año 1985, abriéndose al público en 1992 como centro de conservación, investigación y conocimiento de la flora mediterránea y especialmente de la flora de Balears. En abril de 1997, la entidad se constituyó oficialmente en fundación.
