A las puertas del inicio de la temporada turística, la playa principal del Port de Pollença sigue patas arriba, según denuncia el edil de Unió Mollera Pollencina (UMP) en el ayuntamiento de Pollença, Nadal Moragues, que ayer se mostró muy crítico con la falta de previsión del Ayuntamiento en este sentido.

El partido con base en el Moll lamenta que "a quince días del inicio de la temporada, cuando bastantes hoteles, restaurantes y comercios tienen previsto abrir sus puertas, toda la primera línea del Port de Pollença está hecha un desastre". Diversos operarios se encargaban ayer de recoger los montones de arena que, a raíz del intenso viento de los últimos días, se han esparcido a lo largo de toda la fachada marítima del núcleo costero. Según Nadal Moragues, la fuga de arena es una consecuencia de la falta de mantenimiento y de control por parte de la empresa a la que en verano de 2011 se adjudicó la explotación de la playa, que "no ha cuidado el arenal durante todo el invierno ni ha colocado barreras para evitar que la arena se escape", una práctica que, según recuerda el portavoz de UMP, se ha venido realizando en los últimos años por parte de la anterior concesionaria de la asociación de vecinos del Port y que está recogida en el pliego de condiciones del contrato entre la concesionaria y el Ayuntamiento.

Moragues asegura que los empleados de la concesionaria "trabajan desde hace tres días para allanar la arena de la playa, pero el problema es que no han retirado los residuos y éstos han quedado mezclados con la arena".

Tras la polémica generada el pasado año en el proceso de adjudicación de los servicios de la playa, un concurso que ganó la empresa F & A Beach S. L. en detrimento de la asociación vecinal, excluida por incumplir una cláusula de las bases, el ayuntamiento de Pollença tiene intención de convocar un concurso en los próximos meses para contratar a una nueva empresa concesionaria. Sin embargo, "el Ayuntamiento todavía no ha publicado las bases del concurso, lo que podría retrasar un año más la puesta a punto de las playas", apuntó Moraques. El pasado año, a finales de mayo la playa del Port todavía no disponía de los servicios turísticos habituales.

UMP reclamará al Consistorio que la contratación de una empresa explotadora tenga una vigencia de cuatro años y no de uno para evitar los retrasos que se han venido produciendo en los últimos años y que han causado la indignación de todo el sector turístico del municipio.