El Ayuntamiento de sa Pobla ha ganado el pulso a dos de los trabajadores municipales que el año pasado les llevaron a los juzgados. La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Balears ha dictaminado que el consistorio actuó correctamente al despedir a dos miembros de la brigada municipal que, estando de baja laboral, fueron vistos realizando actividades incompatibles con su estado. Así lo hizo público ayer el portavoz de Independents per sa Pobla, Joan Comes, quien fue alcalde del municipio durante los hechos.

Los dos trabajadores municipales fueron despedidos en 2010 y llevaron al Ayuntamiento de sa Pobla a juicio al considerar que su despido había sido improcedente. En un primer término, los jueces les dieron la razón y condenaron al Ayuntamiento a readmitir a los trabajadores o a indemnizarlos con algo más de 30.000 euros. No obstante, el consistorio recurrió y el juez ahora les da la razón, revocando la sentencia anterior y considerando que ambos despidos son procedentes. Los despidos de los dos trabajadores causaron en su día un gran revuelo entre los sindicatos, que se manifestaron ante las puertas del ayuntamiento con gritos de "cacique" y "dictador" contra el alcalde.

Comes se mostró ayer satisfecho por la resolución del juez y aseguró que el fallo judicial respaldaba la opinión de los muchos poblers que "ven injusto tener que pagar una indemnización a alguien que ha defraudado al consistorio".

En su momento, ambos empleados municipales estaban de baja €uno por depresión y otro por una dolencia lumbar€ y fueron vistos, uno realizando tareas de albañil en una casa de un familiar y otro pescando y descargando material. El ayuntamiento se dio cuenta de lo sucedido en un caso tras la denuncia de un compañero y, en el otro, tras contratar a un detective que investigó al trabajador.