El pleno del ayuntamiento de Santa Margalida dejó de celebrarse el miércoles por primera vez en la sala de actos del edificio consistorial de la Vila y se desplazó hasta el centro cívico de Can Picafort con el objetivo de acercar las decisiones municipales a los diferentes núcleos del municipio. El próximo mes de diciembre, la corporación se reunirá en la localidad de Son Serra de Marina.

La sesión fue seguida por numerosos ciudadanos de Can Picafort. Los diferentes partidos aplaudieron la iniciativa, si bien el PP cuestionó la legalidad de la medida con diversas preguntas al secretario municipal.

Por otra parte, el alcalde Miquel Cifre (Suma pel Canvi) informó de que el Ayuntamiento ha iniciado los trámites para realizar una ampliación del cementerio.

El pleno aprobó también conceder una nueva prórroga de un año a la empresa Sorea para el suministro de agua potable, si bien la intención del pacto de gobierno es la de recuperar la gestión pública del abastecimiento en esta legislatura.