El equipo de gobierno municipal ha dejado la puerta abierta a una posible rebaja de la contribución urbana de cara al año 2013 debido a las quejas y al incremento del valor que han registrado los inmuebles de Sóller como consecuencia de la revisión catastral que actualmente permanece en exposición pública.
El alcalde de Sóller, Carlos Simarro, afirmó ayer en rueda de prensa que "hay margen suficiente para que cada año se pueda rebajar el porcentaje que sirve para calcular la contribución urbana con el fin de no perjudicar tanto a la ciudadanía en unos momentos que son difíciles". La actualización de los valores de los inmuebles se aplicará en los próximos 10 años de forma escalonada, por lo que, aprovechando este incremento, el Consistorio podría ir reduciendo de forma gradual el coeficiente que sirve para el cálculo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
Para el 2012 el Ayuntamiento aprobó una rebaja de diez puntos del tipo pasando del 0,95 al 0,85%, un porcentaje que podría ir reduciéndose de forma progresiva hasta el 0,60 "sin que ello suponga una disminución de ingresos para el Ayuntamiento", afirmó el alcalde, quien apuntó, no obstante, que actualmente "no hay previsión de nada porque se puede ir haciendo de año en año".
Los técnicos municipales explicaron que en 2012 la contribución se incrementará una media "de entre 60 y 100 euros", una cantidad que, de no modificarse, se iría repercutiendo en los recibos de forma anual durante los próximos diez años.
