AnimaNaturalis es la organización convocante de la protesta de hoy en el polideportivo sa Rutlana. Su coordinador en Balears, Guillermo Amengual, remarca que no quieren provocar a nadie, sino simplemente posicionarse en contra de lo que consideran un ejercicio de maltrato animal.

–¿Qué les ha llevado a repetir este año la protesta contra el ´correbou´?

–Somos una organización que defiende los derechos de los animales y los correbous son un acto de maltrato animal. Esperamos que sea el último año que se celebre.

–Ustedes aseguran que el toro sufre.

–Se le atan cuerdas al cuello y a los cuernos, y se le tira constantemente hacia adelante y hacia atrás. Ellos dicen que así controlan al toro, pero lo que hacen es que el animal sufra tirones, dolor de cuello, de cervicales... Recibe golpes, empujones y sufre el estrés de la situación. Hay que tener en cuenta también que el pueblo está en fiestas y que la noche anterior la gente está de botellón y llega el día siguiente y están ebrios. Eso lo complica más aún todo.

–¿En qué consistirá su protesta de hoy?

–Iremos con pancartas y realizaremos una performance, en la que un activista simulará ser un toro. Se le atará y otros activistas tirarán de él. Así la gente, al verlo reflejado en una persona, podrá concienciarse más de lo que le sucede al toro.

–En Fornalutx les acusan de provocar...

–Queremos concienciar y no provocar. El defender los derechos de los animales no es provocar. Nuestros actos siempre son pacíficos.

–¿No temen que se repitan los incidentes del año pasado?

–Esperamos que no se repitan. No tenemos nada en contra de Fornalutx ni de sus vecinos. Pero tenemos que decir que el año pasado desde el Ayuntamiento no se ayudó.

–¿Por qué dice eso?

–El propio alcalde, Joan Albertí, estaba en la plaza de España junto a otros regidores y no se levantó para pedir calma a la gente cuando estuvimos a punto de sufrir un linchamiento. Sufrimos insultos, amenazas y lanzamiento de objetos. Sólo gracias a la intervención de la Guardia Civil pudimos salir de la plaza.

–De sus palabras deduzco que no tienen una buena comunicación con el alcalde.

–Él no nos quiso recibir para proponerle alternativas al correbou. Como la medida que ha adoptado un pueblo de Madrid que también utilizaba un toro en sus fiestas. Este año, en cambio, lo han sustituido por el lanzamiento de una pelota gigante por las calles del pueblo, estilo Indiana Jones. Estaría bien que viesen que sin sufrimiento animal las fiestas son divertidas. Esto es parecido a aquello que les decimos a los jóvenes de que no necesitan el alcohol para pasárselo bien.

–¿Qué les parece que el Ayuntamiento no les haya dejado hacer su protesta en el centro del pueblo?

–Nos han dado permiso para hacerlo en el polideportivo sa Rutlana, que está más alejado del centro de Fornalutx. Lo han hecho con el argumento un tanto vago de que ´en el centro del pueblo hay muchos bares y no sería justo para ellos´. Pero ya sea dentro o fuera de Fornalutx seguiremos haciendo protestas contra los actos de maltrato animal.

–¿Cuántos activistas esperan reunir hoy?

–Podemos ser unos 100, pero dependerá de cada persona. Aunque no se pueda hablar de miedo, hay gente que se lo piensa porque creen que no les van a dejar defender a los animales. Nosotros nunca cruzamos la raya y ya veremos cuál es la reacción de la gente. De momento en algunos foros de medios de comunicación ya hemos podido leer amenazas y frases del tipo ´os esperamos´.