Dentadura desgastada. Hombre mayor. Más de 60 años. De un cierto peso. Costilla bífida. ¿Podría ser un sacerdote u obispo? Todo apunta a que fue una persona relevante; señor, jefe o alto cargo religioso. Se halla ante la que teóricamente es la entrada principal a la basílica de Son Peretó, pero hoy en día aún hay dudas sobre cómo era el acceso al templo. Puede que todos los fieles que acudían a la basílica pisasen la tumba en cuestión al ir a rezar. Conclusión de los profesionales, técnicos y arqueólogos: falta mucho aún por excavar e investigar.

Son Peretó, situado al nordeste de Manacor, a cinco kilómetros y medio en dirección a Sant Llorenç, es una mina. Ayer se presentaron los resultados de la séptima campaña de excavaciones en el mencionado yacimiento de la antigüedad tardía, declarado Monumento Histórico-arqueológico en 1931. El empuje y esfuerzo de Mn. Aguiló contribuyó el pasado siglo a una espectacular colección de restos de valor que en la actualidad sigue ampliándose. Los trabajos de la campaña que finalizará el próximo viernes se han centrado en la zona del baptisterio y habitaciones del sector sur.

Nuevos descubrimientos de silos, tumbas, monedas, bisutería, restos de cerámicas (destacando una olla de considerable tamaño), un bol (vaso) de vidrio y tumbas constatan la importancia de un conjunto litúrgico patrimonial, de carácter municipal, del que sobresalen sus famosas piscinas bautismales y los mosaicos que cubrían el suelo del edificio.

Los directores de esta séptima campaña son Mateu Riera y Miquel Àngel Cau. También hay el antropólogo Llorenç Alapont y el grupo de arqueólogos y técnicos se complementa con la colaboración de Archaeospain, con personas procedentes de EE UU, Canadá e Irlanda. La técnica municipal de Patrimonio, Magdalena Salas, y el concejal de Urbanismo, Bernat Amer, también comprobaron ayer los hallazgos. Amer fue felicitado por su "sensibilidad" con el patrimonio de Manacor. El edil, agradecido, también resaltó el gran trabajo de los técnicos.

En Son Peretó hay unos setenta cuerpos localizados. Estudiados, una treintena. ¿De qué siglos? De entre el V y el VIII después de Cristo. En los terrenos próximos al yacimiento es conocido por muchos que también hay restos arqueológicos. ¿Qué falta entonces por excavar e investigar de Son Peretó? Pues un montón. "Estamos en la punta del iceberg", reconoció Mateu Riera. Los profesionales y políticos locales saben que la crisis puede ´pasar factura´ a los yacimientos arqueológicos, en el sentido de frustrar o recortar nuevas campañas. En cualquier caso, el deseo es el de seguir facilitando las visitas y, en 2012, excavar en el interior de la iglesia. Seguro que habrá muchos más hallazgos.