­¿Estarían ustedes dispuestos a quitarse de en medio y dejar el ayuntamiento de Capdepera en manos de un buen gestor?. La pregunta de uno de los vecinos presente anteanoche en el debate electoral dejó algo fríos a los candidatos. Pero iba en serio.

Los dos más expeditivos del grupo, Plou y Castellano se lanzaron al ruedo: "Creo que los que nos presentamos lo hacemos con el convencimiento de que podemos tirar esto adelante, pero si hay algún gestor mejor que salga si es que está más capacitado".

Para el representante de EU, la economía municipal no debería tener secretos: "La única manera de evitar endeudamiento y el malestar del pueblo sería hacer unos presupuestos participativos, donde los ciudadanos tengan la palabra. El Ayuntamiento debería ser de cristal".

Para Bartomeu Alzina (PSOE), quien ya sabe que es estar al frente del Consistorio, "el gesto de dar un paso al frente creo que ya es muy importante y demuestra un compromiso para intentar hacerlo lo mejor posible". Alzina además destacó las inversiones realizadas en los últimos años en Capdepera como el inicio de las reformas del centro histórico, el centro Cap Vermell o las oficinas de turismo. Aunque a su vez reconoció que el trágico derrumbe del hotel Son Moll a finales de 2008 coincidiendo con la crisis, marcó "un antes y un después" en su mandato.