El grupo Alternativa per Pollença denunció ayer la proliferación de obras públicas en diferentes puntos del Port de Pollença cuando la temporada turística ya se ha iniciado, fruto de una "falta de planificación" por parte del Ayuntamiento a la hora de definir el calendario de las obras, según apunta el portavoz de la formación progresista, Pepe García.

Según Alternativa, las zonas costeras más turísticas del municipio "están totalmente levantadas por las obras", con la "mala imagen y molestias" que ello supone para los turistas que "ya nos han visitado". En la actualidad, se llevan a cabo obras del segundo Plan E en el centro de la localidad y obras de rehabilitación de barrios en la urbanización de Gotmar. A su entender, "los turistas se encuentran con una auténtica zona de guerra con aceras levantadas, barreras y ruido".

Además, la formación critica que las playas del municipio todavía no tienen adjudicatario y que por ello permanecen sin ningún servicio.

Por su parte, el alcalde de Pollença, Joan Cerdà (Convergència) recuerda que la normativa municipal permite la ejecución de obras públicas hasta el uno de mayo, y en algunos casos hasta el 15 de junio siempre que haya consenso con vecinos y comerciantes de la zona afectada. Cerdà asegura que la intención del Ayuntamiento es "hacer todo lo posible" para que el grueso de las obras que están en marcha en la actualidad estén terminadas antes de la próxima Semana Santa, a finales del mes de abril.

El alcalde añade que "son obras imprescindibles" que dependen de subvenciones que "no se podían perder".

Respecto a la adjudicación de las playas, el primer edil explica que ayer se recibió la autorización de Costas y que hoy firmará el decreto para tramitar la licitación, por lo que las playas "estarán en condiciones en unos quince días".