El nuevo colegio público de la zona de Puig de Ros, en Llucmajor, entrará en funcionamiento en septiembre, lo que permitirá acoger a los aproximadamente 250 alumnos que hasta ahora cursaban sus estudios en las aultas prefabricadas de la instalación educativa de Urbanizaciones. Este centro modular había sido fuente de quejas entre los padres de alumnos, que se quejaban de que no garantizaba una correcta dotación de medios.

El conseller de Educación y Cultura, Bartomeu Llinàs, y el alcalde de Llucmajor, Joan Jaume, visitaron ayer las obras del centro, que han supuesto una inversión de 3,6 millones de euros por parte del departamento autonómico del Govern. En la visita, participaron también la directora general de Planificación y Centros, Elvira Badia, y el gerente del Instituto Balear de Infraestructuras y Servicios Educativos y Culturales (Ibisec), Francisco Fernández.

En total, el colegio ofrecerá 450 plazas, 150 correspondientes al ciclo de Infantil y 300, a enseñanza Primaria.

El conseller Llinàs expresó su satisfacción por la rapidez con que se han ejecutado las obras y, en este sentido, recordó que la primera piedra se colocó a finales del pasado mes de octubre.

"Necesidad imperiosa"

Jaume dijo que era "de justicia" que la zona contara con un centro educativo, después del importante crecimiento demográfico que ha habido en las urbanizaciones. "Era una necesidad imperiosa", apostilló.

Diseñado por los arquitectos Diego Galar, Daniel Galar e Imanol García de Albeniz, el CEIP Puig de Ros tendrá seis aulas de Educación Infantil, 12 de Primaria y otra dedicada a la psicomotricidad. Además, según la información facilitada por la conselleria de Educación, habrá otras dependencias, como un comedor, una cocina, una biblioteca, una sala de informática, un gimnasio y vestuarios.

Otra nueva instalación

Durante la visita del conseller Llinàs y del alcalde Jaume, salió también a colación el futuro de otro proyecto de centro educativo en el municipio, concretamente en el núcleo urbano de Llucmajor.

Según informaron responsables del departamento autonómico, esta otra escuela tiene un presupuesto de unos 3,7 millones y su proyecto ya está redactado, por lo que ahora sólo está a la espera de ser licitado.

En este sentido, el conseller dijo que esperaba que, para finales del presente año, las obras puedan arrancar. Cuando se concluya, Llucmajor habrá incorporado un total de 900 nuevas plazas a su oferta educativa pública.