"Muchos años hemos esperado y Díaz Ferrán nos lo ha robado. Marsans, ¿se puede jugar con la ilusión de 30 niños?". La pancarta que exhibieron ayer los alumnos de sexto de primaria del colegio público Porta del Moll de Alcúdia resume el estado de desilusión en el que han quedado sumidos los escolares después de comprobar cómo se ha esfumado el dinero que habían reunido para realizar el viaje de estudios de final de curso que el centro había gestionado a través de una agencia asociada al grupo Marsans, el gigante turístico que se encuentra al borde de la quiebra y del cual es copropietario Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la patronal CEOE.

Hace aproximadamente un mes, los responsables del viaje de estudios a Catalunya que los alumnos tenían programado en la última semana de mayo abonaron 10.000 euros a una agencia de Barcelona, Viajes Crisol, para pagar el trayecto en avión, los desplazamientos por el principado y los hoteles, además de otras visitas programadas a lugares como Portaventura. Sin embargo, hace pocos días, los empleados de la agencia informaron al colegio que el dinero sólo había sido invertido en los billetes de avión a Barcelona, pero no para gestionar el resto de servicios contratados. Literalmente, los 10.000 euros habían desaparecido sin que nadie sepa exactamente qué ha ocurrido. "Después nos enteramos que la agencia, con la que venimos contratando viajes desde hace unos años, está vinculada al grupo Marsans, que está en una grave situación económica, y aquí empezamos a entender la situación", explica Antoni Bibiloni, tutor del curso.

"Los niños llevaban dos años vendiendo polvorones, mantecados y otras cosas en las ferias para reunir el dinero, y cada familia había pagado unos 500 euros", explica Bibiloni, quien no oculta su "rabia" por la situación. "Es repugnante que un empresario de esta envergadura (Díaz Ferrán) se cargue el dinero de niños de once años, es de juzgado de guardia", añade el tutor, que asegura no tener nada contra los empleados de la agencia catalana a la que se pagó el viaje porque "lloraban de pena cuando nos explicaron lo ocurrido y su empleo también está en el aire por la situación de Marsans".

Los niños y sus padres expresaron ayer su decepción. "Esperábamos el viaje desde hacía dos años, y ahora nos han quitado el dinero y el tiempo", explicaba una alumna. Uno de los padres acusó a Díaz Ferrán de "robar a los niños una ilusión de dos años".

A pesar de todo, los niños no pierden la esperanza de recuperar el dinero y hacer un viaje que servirá para olvidar la decepción.