El juzgado de primaria instancia número 5 de Manacor ha desestimado la demanda que interpuso el ex arquitecto municipal, Mateu Carrió, contra el ex regidor de Esquerra Unida-Els Verds Julen Adrián y la también miembro de la misma coalición de izquierdas, María Ramírez Añon. Carrió, que denunció presuntas injurias, falsedades e intromisión ilegítima en el derecho al honor, afectando a su initimidad e imagen, interpuso inicialmente su demanda por la vía penal, alcanzando sin éxito el Supremo. Después recurrió a la vía civil, de momento sin conseguir una sentencia firme contra Adrian y Ramírez.

Adrián, actualmente trabajando en África, se mostró ayer satisfecho: "Este fallo viene a corroborar que lo que hacíamos, María y yo, estaba perfectamente establecido dentro de la práctica normal de la oposición, motivada por la lucha política de entonces, cuando él (Carrió) era un elemento interviniente más en el debate urbanístico, medioambiental y patrimonial".

En esta línea, Adrián recordó que EU-EV criticó tanto a Carrió como al aparejador, César Córdoba, múltiples asuntos, "como las licencias mal dadas; los retrasos en la concesión de permisos; la mala ejecución del teatro; distintas deficiencias en las obras de la calle Ciutat, el cementerio y la viviendas sociales, y la indebida instalación de material PVC, entre otras cosas". Tras cambios en el gobierno local, la Justicia resolvió que Carrió fue despedido de forma improcedente, por lo que recibió indemnizacion (unos 70.000 euros).

Adrián lamentó ayer que Carrió piense recurrir "otra vez" el último fallo judicial. Su actual formación, Verds+Esquerra, cuestiona que haya "quienes abusen de la Justicia" y defiende a Adrián y Ramírez.