La Tau es la última letra del alfabeto hebreo y la decimonovena del griego. En ambos casos se correspondería a la que en el nuestro se le llama "te". Si vamos más allá de la teoría ortográfica y aislamos el símbolo, resolveremos el misterio. El mismo que ahora pretende difundir el Patronat de Sant Antoni.

"En Manacor, el santo venía llevando grabada en el pecho la cruz de Malta o cruz de Sant Joan, que en ningún caso es lo que marca la tradición histórica del anacoreta", cuenta es estudioso de los orígenes de la fiesta en la ciudad, Antoni Gomila, autor junto a Jesús Nicolau y Albert Carvajal del libro publicado en 2007: Sant Antoni de Viana i Manacor, vuit segles de tradició. "Por eso tanto el logo oficial para 2010, como las sudaderas como en el mismo traje de Sant Antoni figurará (a partir del primer baile programado para el próximo siete de enero) la letra acompañada de una pequeña llamarada en la parte superior y una campana colgando abajo", completa Nicolau.

No se sabe muy bien porque durante décadas la iconografía ha unido al patrón de los animales con la cruz de lados iguales. "Sinceramente creo que se trata de un tema de comodidad. El traje se debió hacer de esta forma y para no cambiarlo se decidió salir con el mismo un año tras otro", dice Gomila, quien explica que la letra Tau ´incendiada´ procede de su lucha para curar a los enfermos del mal del foc, un herpes que producía en los afectados unas heridas muy similares a las quemaduras.

Si se acude a los libros de historia religiosa se puede comprobar que el símbolo Tau de los primitivos Antonianos, se convierte en una especie de cruz –posteriormente adoptada por los Franciscanos– de color azul.

El primer documento escrito que confirma la celebración local de la fiesta de Sant Antoni, el denominado Llibre de la Capella, se remonta a 1854, "aunque la bendición de los animales fuera seguro de mucho antes". Los bailes callejeros ya se representaban en las Comèdies Hagiogràfiques de Tomeu Bosch en 1874. Pese a todo, hay que esperar hasta finales del siglo XIX (1883) para encontrar referencias escritas de los primeros dimonis que complementarían la ecuación. "En todo caso es casi seguro que desde el año 1300, que fue cuando se construyó la capilla de Sant Antoni en Manacor, hay devoción y celebración el día del santo", reafirman los autores.