Sólo media docena de establecimientos de Inca podrán montar carpas reducidas para la marcha nocturna de la víspera del Dijous Bo. La noche del miércoles previo a la feria se ha convertido desde hace años en una cita ineludible para la juventud. De hecho, incluso se le ha bautizado con el oficioso nombre de Dimecres Bo.

Tanta fuerza ha cogido la fiesta que este año el Consistorio ha tenido que intervenir con drásticas medidas. La intención es evitar que el acontecimiento desborde la capacidad de mantener la seguridad ciudadana. Cabe recordar que el año pasado se produjo un altercado multitudinario. Un gran número de jóvenes que habían estado de juerga toda la noche pretendía tomar el tren de las siete de la mañana. Al no haber sitio, una gran masa abordó los vagones arrollando a personas y enfrentándose a la Policía.

Prohibido el botellón

El delegado local de Interior, Rafel Torres, explicó ayer que "para evitar que se reproduzca la situación se han tomado dos medidas esenciales; la primera es que se prohíbe el botellón". Para evitarlo, habrá casi un centenar de agentes entre Policía, Guardia Civil y seguridad privada en las calles acotadas para la marcha nocturna. La segunda medida consiste en "adelantar a las cinco de la madrugada el cierre de las barras en la calle y la música", agregó el edil.

El Consistorio ha suprimido además el correfoc y el concierto que se celebraba cada año.

En 2008, hubo más de cien llamadas de vecinos a la Policía Local quejándose del ruido, pues, en cuanto cerraron las carpas de música, comenzaron a instalarse los feriantes y no pudieron dormir en toda la noche. Para evitar que se reproduzca esa situación, el Ayuntamiento ha determinado una limitación de potencia para los equipos de música. Como máximo, se permitirán 6.000 vatios de potencia.

Sólo podrán montar carpas los establecimientos con licencia de bar musical o similar. Las carpas no podrán ocupar toda la calle, sino que tendrán que limitarse a cubrir las barras. No pueden montar carpas empresas o establecimientos que no estén situadas en las calles acotadas. No se puede subarrendar el espacio a empresas foráneas para organizar fiestas.

No se permite la publicidad de fiestas que no sean del propio local inquense que la organiza.

Estas medidas han sido aceptada por los pubs, pero los dueños de cafeterías se mostraban ayer indignados. Muchos de ellos se enteraron de las nuevas normas al ser preguntados por este diario.

"Ni se nos ha invitado a las reuniones donde se han pactado ni se nos han notificado", aseguraba uno de los afectados. Torres explicó que "se invitó a las reuniones sólo a los pubs porque son los únicos que pueden instalar música por ley". "Los demás pueden poner un puesto con comida y bebida pero sin música", agregó.

LAS NORMAS

Sólo pueden instalar carpas los bares musicales– En años anteriores, se instalaban más de veinte carpas en las que se servía alcohol y se ponía música. Este año, sólo se permite hacerlo a los establecimientos que tengan licencia de bar con música o similar. Esto supone que sólo media docena de locales podrá acogerse a la nueva normativa.

Las carpas no podrán ocupar toda la calle– Las carpas que instalen los establecimientos autorizados no podrán ocupar toda la calle. Con anterioridad, se instalaban grandes techados que permitían la aglomeración de gente. Ahora, sólo se podrá techar la zona de la barra del bar.

Prohibido arrendar el espacio a empresas foráneas– En anteriores ocasiones, se detectó que algunos establecimientos instalaban una carpa ante su local y luego la subarrendaban a empresas de espectáculos para montar fiestas. Este año, se prohíbe taxativamente esta práctica. La policía indica que se pagaban hasta 3.000 euros por uno de estos alquileres.

Limitación de la potencia sonora a 6.000 vatios– La potencia de los equipos de música se reducirá hasta un máximo de 6.000 vatios. El Ayuntamiento encargó un estudio a una empresa especializada para determinarlo. En años anteriores, había puestos que instalaban equipos de hasta 30.000 vatios. En 2008, hubo más de 100 denuncias vecinales por no poder dormir.

No se dará licencia a locales que no sean del lugar– Para paliar el perjuicio a los establecimientos que no pueden acogerse a la nueva normativa, el Ayuntamiento permite instalar barras de comida y bebida pero sin música. Para ayudarles más anuncia que no dará licencia de instalación provisional, en la zona acotada para la marcha, a bares y cafeterías de otros barrios, y mucho menos de fuera de la ciudad.