Pere Rotger, alcalde de Inca, anunció ayer que efectuará una consulta a la Fiscalía de Menores sobre la posibilidad de conmutar las multas a los jóvenes que hicieron pintadas en la plaza Mallorca por trabajos sociales.

El munícipe aseguró: "Lo que interesa en este caso es educar. Que los chicos reconozcan que han cometido una falta grave y sepan que no han de hac erlo más; en ningún caso recaudar. Yo quiero proponer a los padres que acepten que se conmute la multa por un número de horas de trabajo en limpieza de jardines o pintura de mobiliario urbano, por ejemplo".

La Policía sorprendió a nueve jóvenes haciendo pintadas el pasado martes. Las ordenanzas especifican una multa de 300 euros por persona, que suman 2.700 en total.