La presión de la dirección regional del Partido Popular obligó ayer al presidente de la junta local de Calvià, Manu Onieva, a suspender las primarias para designar el candidato a la alcaldía cuando ya habían comenzado las votaciones. Onieva justificó esta postura por la posibilidad de que la cúpula del partido –contraria a este proceso– adoptase medidas disciplinarias contra los miembros de la junta.

En sustitución de la consulta, desde Calvià se acordó con el líder del PP balear, José Ramón Bauzà, que, ayer, una junta local extraordinaria pudiese designar un aspirante provisional a alcalde. Onieva fue el elegido al contar con el respaldo de 37 votos. Se registró una abstención y ningún sufragio en contra. Aún así, deberá ser ratificado por la dirección regional cuando se abra el periodo preelectoral.

La decisión de paralizar las primarias en torno al mediodía (habían empezado a las nueve de la mañana) fue el acto final de un tenso pulso que han mantenido en la última semana el PP calvianer y la dirección del partido, que se oponía a que la consulta se realizase sin respetar los ritmos electorales que marcan sus estatutos.

La víspera de la elección –el miércoles pasado– la cúpula popular instó a Onieva a anular la convocatoria. Éste la mantuvo, con la concesión de que no se llamarían primarias, sino "proceso consultivo interno". También se comprometía a que el candidato elegido tuviese que contar después con el beneplácito de la dirección.

Medidas disciplinarias

Sin embargo, ayer, el líder de la junta local cedió y anuló la elección. El motivo, dijo Onieva, reside en las declaraciones del vicesecretario general del Partido Popular balear, Miquel Ramis, en que avisaba de que podría haber "consecuencias" para los componentes de la junta local. Ante posibles represalias en forma de medidas disciplinarias y suspensiones de militancia, y después de hablar telefónicamente con Bauzà, Onieva decidió paralizar la consulta. "Si (estas sanciones) sólo me hubieran afectado a mí, hubiese seguido adelante. Pero hubiesen afectado a toda la junta local", arguyó el presidente del PP calvianer.

El líder de la junta local habló con Bauzà de la urgencia de "poner en circulación de inmediato" al aspirante del PP a la alcaldía. "El candidato no se puede presentar en noviembre de 2010. Se tiene que presentar ya mismo. Si no, vamos a perder el municipio", alegó. Al final, ambos acordaron que ayer se pudiese celebrar una junta local extraordinaria para elegir un candidato provisional a alcalde, que, en todo caso, deberá ser ratificado por la dirección insular. Onieva, hombre de máxima confianza del alcalde Carlos Delgado y que fue elegido líder del PP calvianer el pasado octubre, resultó el elegido. Teresa Martorell, que sí formalizó candidatura a las primarias, no la presentó en esta ocasión.

"No han dado opción"

Pese a todo lo sucedido, Onieva hizo un balance positivo de cómo había transcurrido la jornada. "Ha sido un éxito para el PP de Calvià. Es verdad que no hemos podido tener las primarias. Hemos luchado hasta el final para celebrarlas. No nos han dejado otra opción. Pero, como pretendíamos en un principio, hemos conseguido que al final el futuro candidato a alcalde se presente pronto", argumentó.