El ayuntamiento de Marratxí ha denunciado a cinco personas por una serie de presuntas estafas al servicio de aguas municipal.

Mediante la utilización de diversos métodos, tales como la colocación de plásticos o bridas en los contadores para mantener el consumo a cero, los presuntos estafadores gastaban grandes cantidades de agua: unos 1.000 litros al día en un o de los casos, para un total de dos millones de litros gastados hasta hoy por parte de los cinco denunciados. Lo que el Ayuntamiento ya ha calculado económicamente y que asciende a 3.000 euros. Según este, lo grave es que ahora la cantidad, deberá "ser compartida entre todos los ciudadanos". El delegado de Aguas, Tomeu Oliver, ha declarado que la actuación debe "hacer ver a los presuntos infractores que todos los ciudadanos de Marratxí tienen los mismos servicios, los mismos derechos y los mismos deberes, y por tanto deben abonar lo que gastan". El servicios de aguas ha asegurado que perseguirá y revisará con ahínco cualquier anomalía del servicio a través de los celadores, fontaneros municipales y la presencia policial.

Vertidos incontrolados

Por otro lado, el área de Medio Ambiente también está llevando a cabo actuaciones a fin de evitar los vertidos incontrolados por parte de determinadas empresas del polígono de Can Rubiol al torrente, a través de las pluviales. Para comprobarlo, el Ayuntamiento ya ha instalado una cámara robotizada en el interior de las tuberías para analizar los actos punibles. Hasta ahora son 11 los posibles infractores de la ordenanza medioambiental por vertidos. De estos expedientes sancionadores, cuatro han sido resueltos. Se prevé también la colaboración de la dirección general de Recursos Hídricos del Govern.