Llucmajor brindó su último adiós a Juan Caldés Lizana, hijo predilecto del municipio, fallecido en Madrid el pasado 30 de mayo a la edad de 87 años.

La iglesia parroquial de San Miguel fue ayer escenario del multitudinario funeral en memoria de este eminente llucmajorer, al que asistió la práctica totalidad de los ediles de la corporación, encabezada por el alcalde de la localidad, Lluc Tomàs, así como vecinos y familiares.

Caldés fue distinguido en 1970, siendo Andreu Martín primer edil. Abogado de profesión, pasó gran parte de su vida en Madrid, donde, entre otros cargos, ejerció como director general del Banco de España, tesorero del Consejo General de la Abogacía Española, presidente de la Mutualidad de Previsión Social de la Abogacía y presidente de la Confederación Nacional de Mutualidades.

Aún así, nunca se olvidó de su pueblo natal, donde venía a pasar alguna temporada, indicó Tomàs, que calificó a Caldés como "un personaje muy importante en el mundo de las finanzas". Un hombre "muy trabajador, indulgente y humano", añadió.

Durante la misa, que fue oficiada por el pare Jaume, un franciscano primo del fallecido, informó Tomàs, se rindió homenaje a su figura y trayectoria profesional.

El acto contó, igualmente, con la participación de los familiares de Juan Caldés.