La asociación proteccionista ARCA exige a todos los grupos políticos del ayuntamiento de Palma que se comprometan a la “erradicación de las pintadas” en la ciudad, debido a que atentan contra el patrimonio urbano y la imagen global de la capital balear.

La entidad que vela por la preservación de estos bienes quiere que el pleno municipal que se celebrará el jueves apruebe una propuesta “por unanimidad” para “prevenir y actuar contra la proliferación” de grafiti y pide a los partidos, tanto los que conforman el equipo de gobierno del Pacto como la oposición, que incluyan en su acuerdo “la investigación de los autores de las agresiones”.

La asociación considera que la propuesta plenaria tiene que contar con tres apartados claros: En primer lugar, reconocer la gravedad del problema paisajístico que causan estas intervenciones, así como la “agresión a bienes particulares y colectivos, siendo especialmente grave cuando se practica sobre piedra viva, piedra de marés y otros elementos patrimoniales”, como ocurrió hace dos veranos con la proliferación de grafiti en el casco antiguo contra la invasión turística.

El segundo punto que reclama ARCA es el compromiso de los partidos para prevenir las citadas acciones incívicas, restaurar el patrimonio dañado en caso de que se produzcan e investigar a los autores de las agresiones para imponerles la correspondiente sanción. “A tal fin se deberían decidir en un plazo de tiempo breve qué acciones de vigilancia, investigación y protección, así como criterios de restauración, se tienen que seguir”, tal como explican en una nota de prensa.

Por último, la entidad pide “establecer complicidades efectivas entre las tres administraciones públicas para llevar a cabo los propósitos mencionados”. Y quiere que haya “acciones inmediatas por unanimidad con el compromiso de la sociedad para detener la proliferación de este incivismo, que ya afecta a la montaña de Palma y los árboles, además de las calles”.

El grupo municipal del PP tiene previsto presentar una proposición plenaria en este sentido, por lo que la asociación proteccionista ARCA pide aprovechar el debate sobre este punto del orden del día “para acordar una transaccional por unanimidad o encontrar otra fórmula”. El objetivo es evitar “el grave perjuicio de las pintadas sobre el patrimonio”, concluyen en el comunicado de prensa.

Uno de los caballos de batalla de la entidad siempre ha sido la lucha contra la proliferación de grafiti, sobre todo en edificios y elementos patrimoniales de gran valor de la ciudad, como ocurre a menudo en el Baluard del Príncep e incluso en monumentos tan emblemáticos como el castillo de Bellver.