El ruido es el mayor problema planteado por los vecinos en relación al alquiler vacacional de viviendas plurifamiliares, según constata la Defensora de la Ciudadanía, Anna Moilanen en las conclusiones preliminares de un informe elaborado a raiz de las quejas que han llegado a su oficina.

Con el fin de aportar elementos para el debate sobre la zonificación del alquiler vacacional que debe aprobar el Ayuntamiento de Palma antes del próximo mes de julio, el informe de la Defensora pone de manifiesto asimismo que, "con las herramientas administrativas actuales", Cort "no acierta en la resolución del problema porque no llega a tiempo".

Asimismo, se señala que las personas no residentes que ocupan las viviendas de alquiler turístico "no siempre son respetuosas con los derechos de quien habita las barriadas y provocan diversas molestias como ruido, suciedad e, incluso, desperfectos que alteran la vida normal de las barriadas".

Si bien se acepta que los propietarios, "en el ejercicio de sus derechos", se preocupan para adaptar las viviendas "no siempre adoptan medidas preventivas que garanticen el impacto mínimo" de quien ocupará el piso.

En un elevado porcentaje, las personas que alquilan estas viviendas son personas jóvenes y lo hacen por un tiempo comprendido entre los cuatro y diez días de media y "alargan su actividad hasta altas horas de la noche, afectando al descanso de los vecinos".